El PSOE abre una investigación interna sobre las relaciones de Juan Guerra con la Administración

La dirección del PSOE de Andalucía ha abierto una investigación interna sobre las actividades de Juan Guerra que incluye, entre otros puntos, las presuntas relaciones mantenidas con las administraciones y otras entidades públicas para sus negocios privados, en una de las cuales Juan Guerra tuvo despacho a lo largo de seis años. Esas dependencias fueron habilitadas ex profeso para el vicepresidente del Ejecutivo, Alfonso Guerra, en los primeros meses de 1983, según datos confirmados por un colaborador de Leocadio Marín, en aquella época delegado del Gobierno en Andalucía.

Alfonso Guerra utilizó ese despacho en algunas ocasiones y recibió en el mismo a un alto cargo de un país árabe. Al principio Juan Guerra aparecía esporádicamente por allí, como secretario o ayudante" del vicepresidente del Ejecutivo y vicesecretario general del PSOE.Alfonso Guerra dejó de utilizar tales dependencias muy pronto y desde entonces sólo fueron usadas por Juan Guerra y las personas que le acompañaban, todos ellos meros ciudadanos particulares, que se quedaron allí por espacio de seis años.

El mismo colaborador de Leocadio Marín confirmó datos avanzados ayer por este periódico, en el sentido -de que nunca hubo nombramiento oficial ni relación contractual de ninguna clase entre la Administración del Estado y Juan Guerra González. El despacho fue habilitado poco después de la inauguración de las nuevas instalaciones de la delegación del Gobierno, en la plaza de España de Sevilla.

Mientras tanto, la dirección del PSOE de Andalucía mantiene abierta una investigación interna en torno a las actividades desarrolladas por Juan Guerra, y al posible abuso de su apellido para actividades económicas y empresariales de considerable importancia.

Los dirigentes del PSOE de Andalucía esperarán a que los fiscales de Cádiz y Sevilla terminen las diligencias informativas abiertas sobre los negocios de Juan Guerra, antes de abrir un expediente disciplinario. Carlos Sanjuán manifestó ayer que él, como secretario general del PSOE de Andalucía, abrirá un expediente de expulsión del partido a Juan Guerra, si se comprueba que "ha habido un aprovechamiento de su apellido" para realizar sus actividades empresariales.

La apertura del expediente ha sido solicitada por la corriente crítica del PSOE Democracia Socialista, cuya representante en Andalucía, Remedios Vargas, manifestó que "el partido debe investigar hasta el fondo" las actividades de Juan Guerra. Carlos Sanjuán precisó que cualquier iniciativa que emprenda el partido respecto a Juan Guerra "se hará sin ánimo de linchamiento moral y con serenidad". El caso Guerra fue uno de los temas más comentados ayer en la conferencia, organizada por el PSOE andaluz, sobre la estrategia de los socialistas en los principales núcleos de población de Andalucía, y en la que tuvieron ocasión de encontrarse el actual presidente de la Junta de Andalucía, José Rodríguez de la Borbolla, y el del PSOE regional, Leocadio Marín, posible candidato de la dirección actual para suceder a aquél.

El socio

La intervención de los fiscales en los negocios de Juan Guerra ha sido bien recibida por uno de sus socios principales, Juan José Arenas Casas, quien manifestó a este periódico: "Me parece fenomenal que intervengan los tribunales de justicia para que pongan las cosas en su sitio".

Juan José Arenas es socio de Juan Guerra en las empresas sevillanas Corral de la Parra, SA, y Cimpa, SA. Existe una tercera, denominada Cosmosat Andalucía, dedicada a la importación de componentes electrónicos y antenas parabólicas, que tiene el mismo domicilio social que las dos empresas anteriores y está presidida por Arenas. En ella no aparece el nombre de Juan Guerra.

Arenas no quiso realizar comentario alguno acerca de las compras realizadas por la sociedad Corral de la Parra, SA, cuyo objeto social es la promoción, construcción y venta de inmuebles. "De lo que publican los periódicos no hay ni un 20% que sea cierto. Yo me pongo las manos en la cabeza".

Juan José Arenas dijo que no había mantenido ninguna entrevista con Juan Guerra desde que empezó la polémica: "Ya me gustaría a mí darle un abrazo y darle moral, aunque creo que se hartará de reir con algunas cosas".