El Gobierno ofrece una subida del 5,7% para pensionistas y funcionarios con cláusula de revisión

El Gobierno ofrece un aumento en las pensiones y los salarios de los funcionarios del 5,7% -nueva previsión de inflación del Ejecutivo- y una cláusula de revisión que garantice la desviación de los precios, mientras que UGT y CC OO reclaman una mejora del poder adquisitivo. La sesión negociadora de ayer sirvió para que Gobierno y sindicatos encontraran también divergencias claras respecto a la deuda social y para que alcanzaran un principio de acuerdo en el reconocimiento del derecho de negociación colectiva de los funcionarios.

Para garantizar el derecho a la negociación de los funcionarios, los sindicatos van a elaborar un documento que presentarán en la nueva reunión fijada para el próximo día 24 y un borrador referido al otro punto de acuerdo logrado ayer y por el cual se desvinculan de los Presupuestos Generales las subidas que se fijan en los convenios de las empresas públicas y de los organismos autónomos.En las nueve horas de negociaciones, Gobierno y sindicatos encontraron divergencias claras en la revalorización de pensiones, las subidas para funcionarios, la actualización del salario mínimo y la deuda social. Las dos partes han pactado no dar cifras a los medios de comunicación "para no enterrar las posibilidades de acuerdo", según los dirigentes sindicales, y sólo ofrecen información sobre "los conceptos teóricos discutidos" que, en la mayoría de los casos, se convierten en difíciles jeroglíficos.

El punto que ocupó buena parte de la negociación es cómo medir el poder adquisitivo perdido por los funcionarios y mientras el Ejecutivo tiene en cuenta las diferencias entre el aumento recibido y la inflación final, las centrales piden que se reparen todas las expectativas de mejora del poder de compra fijadas en la ley de Presupuestos de 1989. Sí hubo intentos de aproximación para que el Gobierno reconozca la universalización de la deuda para todos los funcionarios, ya que hasta ahora sólo la admitía para los 157.000 empleados públicos que considera han tenido incrementos inferiores al aumento de precios final de 1989 -el 6,9%- y que son trabajadores de la Seguridad Social y personal sanitario. Para el resto de colectivos argumenta que han negociado incrementos adicionales al 4% inicial firmado por la Confederación Sindical Independiente de Funcionarios (CSIF).

Tampoco ha habido avances en la fijación del salario mínimo interprofesional que debe servir como referencia para equiparar la pensión mínima contributiva con cónyuge a cargo y, a partir de ella, diseñar el cuadro de todas las pensiones. El Gobierno ha variado la horquilla en que se puede mover para aumentar el salario mínimo y ahora habla de una cifra entre el 5,7% y el 7% La razón es que ha cambiado de nuevo su previsión de inflación, estimada hace 20 días entre el 5,5% y el 6%, posteriormente concretada en el 5,5% y ahora en el 5,7%. Para las pensiones superiores al salario base el Gobierno ofrece un aumento del 5,7%.

Paso atrás en pensiones

En la revalorización de las pensiones y el reconocimiento de la deuda social de los jubilados "se ha dado un paso atrás" sobre el acercamiento conseguido en la reunión del día 10, según el ministro de Economía, Carlos Solchaga. La causa es que los sindicatos creen que el incremento adicional de las pensiones aplicado en marzo pasado corresponde a la deuda social pendiente de 1988 y no debe ser considerado como aumento correspondiente a 1989 a la hora de medir el poder de compra perdido.A la hora de fijar el aumento salarial de 1990 para funcionarios tampoco hay acuerdo, dado que el Ejecutivo ofrece una subida que mantenga el poder adquisitivo y, en consecuencia, igual a la previsión de inflación ahora estimada en el 5,7%; con una novedad respecto a reuniones anteriores, y es que admite cláusula de revisión que garantice la desviación de la inflación para este colectivo. Las centrales demandan una mejora del poder adquisitivo y además toman como referencia un aumento de los precios superior y que UGT cifra en el 6,5% y CC OO en el 6,7%.

Los sindicatos no han concretado el aumento que piden para funcionarios aunque parece que manejan una cifra similar al 8%9% reclamado para el conjunto de los trabajadores. El secretario general de UGT, Nicolás Redondo, declaró ayer en Barcelona que el sindicato no va a aceptar incrementos salariales por debajo del 7% para 1990. Redondo aseguró que hay una inflación estructural cercana al 7%, y añadió que "UGT va a exigir aumentos salariales reales. No estamos dispuestos a que los funcionarios y pensionistas vuelvan a perder poder adquisitivo, como en 1989" y rechazó de plano la previsión de inflación del Gobierno.

El secretario de UGT descartó la proposición de CEOE para negociar un acuerdo interconfederal sobre salarios, y aseguró que los trabajadores ya han cedido bastante en los últimos años y que "ha llegado el momento de empezar a repartir los beneficios de la economía española".