Una historia maravillosa
La leyenda del santo bebedor es, sin duda, uno de los grandes éxitos de esta temporada cinematográfica. Que esta atención entusiástica de los cinéfilos se produzca además con motivo del estreno de una producción europea exigente y sin concesiones a la facilidad ni a las modas imperantes demuestra que el público en algunas ocasiones también sabe distinguir las películas interesantes de las inútiles o disparatadas.El guión de este filme se inspira en un relato del escritor Joseph Roth, que fue publicado después de su muerte y en el que se cuenta la historia de un hombre que malvive bajo los puentes del Sena hasta que un día, inesperadamente, recibe la visita de un anciano caballero, devoto de santa Teresita de Lisieux, el cual le entrega 200 francos para que ponga su vida en orden a condición de que los devuelva a la santa cuando pueda.
La leyenda del santo bebedor
Dirección: Ermanno Olmi. Guión: Tullio Kezich y Errrianno Olmi, sobre la obra del mismo titulo de Joseph Roth. Música: Igor Stravinski.Intérpretes: Rutger Hauer, Anthony Quayle, Sandrine Dumas, Sophie Segalen. Estreno en Madrid: cine Alexandra (V. O.).
Ermanno OImi ha conseguido trasladar a la pantalla el relato de Roth con una inspiración sostenida, ahondando en la vida del protagonista, llena de enormes contradicciones, con la falsa y apacible euforia que sólo puede proporcionar la bebida. Frente a las habituales condenas moralistas o a las recomendaciones románticas, Olmi examina, desapasionadamente, las consecuencias del alcohol en la vida humana.
Desde Dreyer y su Ordet hay pocas obras cinematográficas que se hayan atrevido con tanta audacia a contemplar las consecuencias cotidianas de los milagros, con una aproximación simple y directa y un ritmo detenido y moroso hasta el límite de lo soportable. El protagonista vive una existencia iluminada por una ayuda sobrenatural, más allá de las miserias físicas, en una ciudad sin límites ni fronteras en la que los sueños del pasado y las evocaciones del presente configuran una inocencia extraña.
La leyenda del santo bebedor es una película sorprendente que no se parece a las demás y que tiene el encanto inimitable de los mejores trabajos de Olmi -El empleo, El árbol de los zuecos, Larga vida a la señora...-, sobre el texto inimitable de Roth, en una de las mejores adaptaciones cinematográficas de los últimos años.
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