Bonn descarta la concesión de créditos al consumo al Gobierno alemán oriental

ENVIADO ESPECIALLa República Federal de Alemania (RFA) descartó ayer la concesión de créditos destinados al consumo y apostó por una ayuda económica "de abajo arriba" para la República Democrática Alemana (RDA), según palabras del ministro de Economía, Helmut Haussman, basada en las inversiones privadas en las llamadas joint ventures y en la transferencia de tecnología y el adiestramiento de empresarios y trabajadores. Por otra parte, el Gobierno de la RDA fijó ayer definitivamente la fecha de las elecciones legislativas para el próximo día 6 de mayo.

La convocatoria electoral se ha producido en un clima enrarecido por la radicalización popular que podría plasmarse en una huelga general en favor de la absorción del país por la RFA.El ministro de Economía de la RFA, Helmut Haussman, que se entrevistó en Berlín Oriental con su colega Christa Luft y, posteriormente, con el primer ministro Hans Modrow, ofreció a media tarde una conferencia de Prensa en la representación diplomática de Bonn en la capital de la RDA, pero no desveló casi ningún detalle concreto sobre el plan de ayuda económica que Bonn va a realizar en este país.

Haussman insistió en que la RFA no pretende "comprar la RDA",, en que la ayuda económica se realizará "de abajo a arriba y no de arriba a abajo", en el sentido de que Bonn entiende la ayuda como una inversión mutua entre las dos Alemanias en la que ambas tienen mucho que ganar. El ministro de Economía hizo una somera descripción de los males detectados en la RDA corno la necesidad de construir una Infraestructura completamente nueva", dentro de un "sistema social abierto", recalcando que, además, esto debía hacerse "en muy poco tiempo, y ahora mismo".

Comisión interalemana

De su conversación con Modrow, Haussman destacó el acuerdo al que habían llegado de constituir de inmediato una Comisión Económica Interalemana (un organismo del que se rumorea, que ya lleva existiendo más de 15 días), pero recalcó que el Gobierno federal no pretendía asurnir más que un papel coordinador, ya que el empuje debía ser dejado a los Gobierno regionales y a la iniciativa privada.

En este sentido, Haussman recalcó la importancia de las regiones fronterizas entre las dos Alemanias para llevar a cabo este nuevo y difícil milagro económico. La posibilidad de que trabajadores de la RDA de las zonas fronterizas pasen cada día a trabajar a la RFA también se contempla en el plan, destinado, sobre todo, al desarrollo de una red de empresas pequeñas y medianas. Según el ministro, en la actualidad más de 7.000 empre sas de la RFA de este tipo tienen ya algún contacto, aunque pequeño, con la RDA. Desde esta base ya existente se podría avanzar con más rapidez, indicó.

La transferencia de tecnología y conocimientos laborales, tropieza, sin embargo, con la lista de productos que los países occidentales tienen prohibido exportar al Este, conocida como el COCOM. Haussman indicó que la entrevista del secretario de Estado norteamericano, James Baker, el martes con Hans Modrow, indicaba que Estados Unidos podría mostrarse flexible en este punto.

También visitó Berlín Este el ministro de Medio Ambiente de la República Federal de Alemania, Klaus Töpfler, quien ofreció una ayuda de 1.000 millones de marcos para 17 proyectos de limpieza y conservación, entre los que se encuentra la descontaminación del río Elba.

Sin embargo, la impresión general es que los miembros del Gabinete federal de Bonn se guardan las mejores bazas para la visita del canciller Helmut Kohl los próximos días 19 y 20 a Dresde.