Dimite en pleno la cúpula del deporte en la RDA

Las reuniones y los acontecimientos sobre el deporte alemán oriental se suceden en los últimos días, con continuas críticas contra la política deportiva ejercida por el tambaleante partido comunista (SED). Si el propio partido gobernante, y único por el momento, acaba de elegir nuevo dirigente máximo en un ambiente casi de disolución, es lógico que los apuros también persigan al deporte y que caigan cabezas en este apartado tan importante en la RDA.La DTSB debe elegir hoy, teóricamente, un nuevo presidente, pero con unas directrices bien distintas al pasado- Por primera vez deberá ajustarse a la Filosofía que ha indicado siempre la propaganda del régimen, pero que nunca se ha cumplido. La DTSB debería haber sido la organización de masas socialista para el deporte en la RDA, -ncargada de promoverlo y organizarlo para todas las capas de la población. Pero se ha especializado excesivamente en cuidar con esmero el deporte de alta competición. Aunque los éxitos han sido enormes, es algo que con los cambios no se perdona.

Reunión con Modrow

Buena prueba de ello es que el propio primer ministro del Gobierno, el refórmista Hans Modrow, tuvo tiempo el pasado lunes para llevar a cabo un encuentro con deportistas, entrenadores, dirigentes, técnicos y médicos. En la reuníón quedó claro que la opinión mayoritaria se inclinaba por dedicar menos atenci&.a al deporte de elite y más al de masas.

Modrow criticó duramente, por ejemplo, el proyecto de construir 1.000 canchas de tenis, deporte prácticamente abandonado en la RDA hasta ahora, por ser considerado típico de países capitalistas. Cuando se ha intentado desde la DTSB promover el tenis, dentro de la apertura política, ha chocado con el inconveniente de su individualismo, que también podría ser considerado elitista. Modrow se refirió a que las inversiones deberían ir a parcelas más populares. Sin nombrarlo, hacía alusión al fútbol, deporte en el que Alemania Oriental no ha acabado nunca de brillar y que acaba de quedarse recientem,cnte, una vez más, sin clasificarse para una fase final del Mundial.

El jefe del Gobierno exigió incluso a los participantes en el encuentro que no esperaran a la proclamación de una ley sobre el asunto, y les exhortó para que pensaran en caminos que pudieran solucionar los problemas. Señaló claramente que los problemas tieneri su origen en la dirección de la DTSB por su excesiva dedicación al deporte de elite, y conciuyó diciendo que el futuro de la alta competición será considerado por los nuevos dirigentes, pero que se atenderá fundamentalmente al pueblo.

Klaus Eichler, que dimitió ayer de su cargo como presidente de la DTSB, estaba muy unido a Egon Kreriz, el hombre que sustituyó durante sólo unas semanas a Erích Honecker al frente del partido comunista de la RDA. Elchler fue muy criticado cuando asumió el cargo hace sólo 13 meses, ya que era un hombre que provenía de la economía y carecía de experiencia en el deporte. Pese a que en los últimos meses Eichler trató de salvar su posición destapando la supuesta corrupción existente en la DTSB durante el mandato de su predecesor, Manfred Ewald, su política no ha servido para continuar en el cargo. La crisis se inició con el suicidio de Franz Ryzd, de 62 años, responsable histórico de finanzas del máximo organismo deportivo del país, y ha finalizado, con la dimisión de la cúpula de la DTSB.

Atletas de elite

En medio de la polémica, y acusados de haber recibido un trato privilegiado, los deportistas de elite tratan de salvarse de la quema. El mejor lanzador de peso mundial, Ulf Timmermann, y la gran especialista de salto de longitud y 200 metros, Helker Drechsler (retirada este ano por su maternidad), se defendieron ante el primer ministro Hans Modrow de las; críticas sobre sus ganancias. Sejustificaron diciendo que también ellos han aportado mucho esfuerzo personal y que bastante dinero no se lo han quedado al ir destinado al Estado.

Y, mientras tanto, apenas se ha empezado a destapar en el espinoso tema del doping. 14 casos admitidos en 1988, en la primera ocasión en que abrió, a la Prensa el hermético laboratorio de Kreischa, cerca de Dresde, parece el principio del ovillo de muchas sospechas.