Checoslovaquia estrena hoy Gobierno de "unidad nacional"
El nuevo primer ministro checoslovaco, Marian Calfa, anunció ayer que hoy, domingo, dará a conocer la composición de su nuevo Gobierno, que calificó de "unidad nacional" y en el que los comunistas pierden el monopolio después de 41 años. Su Gabinete, que entrará hoy mismo en funciones, tiene 10 miembros del Partido Comunista Checoslovaco (PCCh), 7 sin partido, dos socialistas y dos del Partido Popular, hasta ahora aliado de los comunistas.
El portavoz de la oposición democrática, Vaclav Havel, se declaró satisfecho con los cambios.Previamente el presidente Gustav Husak, de 76 años, anunció en una alocución televisada al país su dimisión, con efecto en el mismo momento en que el nuevo Gobierno asuma sus funciones. Husak fue el hombre nombrado por el Kremlin en 1969 para iniciar lo que se denominó la normalización política, después que los carros de combate del Pacto de Varsovia, dirigidos desde Moscú, aplastasen la experiencia liberalizadora de la primavera de Praga.
En una intervención ante la televisión, Calfa -un comunista eslovaco-, que sustituyó a Ladislav Adamec al frente del Gobierno con el que había colaborado estrechamente, dijo que la composición del nuevo Gobierno "es la mejor que he podido conseguir en estos momentos precisos".
También ayer presentó su renuncia a los dos cargos oficiales que aún mantenía el que fuera primer ministro durante 20 años, Lubomir Strougal, otro dirigente implicado en el proce so de normalización. Strougal ha presentado su renuncia como miembro del Comité Central del PCCh y como parlamentario.
Los cambios que se anunciaron en las primeras horas de la noche de ayer son, en opinión de Alexander Dubcek, el líder de la primavera de Praga, "de un interés total para la sociedad".
Entre las primeras informaciones acerca de la composición del nuevo Gobierno, se dice que de los 10 comunistas, al menos dos son considerados auténticos reformadores: el economista Valtr Koinarec y VIadimir DIohy. Ambos formaban parte de la lista de la oposición Foro propuso a Jan Carnoguski como viceprimer ministro. Este último, un abogado católico, manifestó que este nuevo gobierno garantizará la transición hacia la democracia.
La lista del Foro Cívico
El Foro Cívico incluyó en la lista a destacadas figuras de la oposición, como Vaclav Havel y Jiri Dienstbier; éste podría acceder al puesto de ministro de Asuntos Exteriores.
Calfa dará a conocer hoy la composición íntegra de su gobierno, que una vez ratificado por el presidente de la República entrará en funciones. Simultáneamente entrará en vigor la dimisión del jefe del Estado, Gustav Husak.
El jefe del PCCh, Karel Urbanek, aseguró ayer que los comunistas conservarían el ministerio de Defensa en razón a la pertenencia de Checoslovaquia al Pacto de Varsovia.
De acuerdo con el uso constitucional, los jefes de los gobiernos regionales de Eslovaquia y Checo, Milan Cic y Frantisek Pitra, deben formar parte como vice primeros ministros del gobierno federal.
La oposición ha declarado en varias ocasiones que podría admitir que el ministro del Interior fuera un comunista, siempre y cuando la policía sea sometida al control de la jefatura del gobierno. Ayer mismo, el actual ministro del Interior, Frantisek Pinc, hizo un llamamiento para reorganizar la policía que garantice los derechos y los intereses de los ciudadanos.
Los estudiantes han acusado a la policía de destruir sistematicamente documentos y se han ofrecido para montar guardia en los archivos con el propósito que no se pierdan intencionadamente documentos importantes para comprender y documentar el reciente pasado checoslovaco.
Por otra parte, la publicación clandestina Lidove Noviny informó ayer que ha formalizado su inscripción como revista ,legalizada y editará sus ejemplares dos veces por semana a partir del próximo 2 de enero de 1990.
La publicación representaba el punto de vista dé la oposición democrática y en su redacción figuraban nombres como el de Havel y Dienstbier. Fue fundada por el disidente Jiri RumI, que había sido encarcelado hace dos meses, bajo la acusación de subversión, y que fue puesto en libertad a raiz de la imparable escalada de acontecimientos políticos en Checoslovaquia.
Poco antes del anuncio radiotelevisado del primer ministro Marian Calfa, el jefe del Estado checoslovaco, Gustav Husak había anunciado que renunciaba a su cargo desde el mismo momento que se constituya el nuevo Gobierno de Praga. "Cuando haya nuevo Gobierno dimitiré", dijo el anciano dirigente, "y propondré al Parlamento que elija nuevo presidente en el plazo de 14 días".
