Gorbachov desea que el cambio no dañe la estabilidad

La suprema responsabilidad de la política contemporánea, cuando Europa concluye por fin el período de posguerra, es lograr que el inundo cambie sin perder la estabilidad, según la esencia del mensaje que Mijail Gorbachov propagó ayer en la Ciudad Eterna, en el mismo lugar donde en 1957 se firmara el Tratado de Roma, que puso los cimientos de la Comunidad Europea. "Ponderación" era la palabra estrella del mensaje de Gorbachov, que en la sala Julio César del Campidoglio comparó la perestroika con el Renacimiento, en cuanto ambos conceptos suponen procesos que impulsan valores humanísticos universales.

ENVIADA ESPECIALPara que la estabilidad se conserve es necesario que todos actúen "ponderadamente", y "no es admisible que un comportamiento torpe o unas declaraciones provocativas comprometan el desarrollo de un proceso que marca época", dijo Gorbachov, que aludía así veladamente, en opinión de los observadores políticos, el punto más delicado de continente: Alemania. "Toda intento de instrumentalizar cuanto sucede con fines egoístas, de aprovecharse de la situación para beneficiarse lo más posible de la aceleración de los acontecimientos en un sentido ventajoso para uno mismo, puede provocar el caos", dijo el líder soviético.En vísperas de la cumbre de Malta, mañana y pasado, Gorbachov ha aprovechado su viaje a Roma para clarificar algunos de los planes de decoración de la distintas habitaciones de la casa común europea. En la que corresponde a las dos Alemanias, el concepto de "revanchismo" ha sido evocado en más de una ocasión, tanto por el ministro de Asuntos Exteriores, Edvard Shevardnadze, que lo planteó a su colega italiano, Glanni De Michelis, como por Guenadi Guerasimov. El portavoz de Exteriores soviético calificó de "fáscismo" cualquier utilización política de la sentencia del Tribunal Constitucional de la República Federal de Alemania, que en 1972 contemplaba las fronteras de Alemania en los confines de 1937. "Algunos hablan de un IV Reich", señaló Guerasimov.

Cita en Palma de Mallorca

El Mediterráneo ha sido la otra habitación, tal vez la piscina, que Gorbachov ha examinado en Roma. Medios soviéticos señalan que sus ideas sobre este mar, expuestas en Belgrado en marzo de 1988, serán acabadas de desarrollar en Malta. El líder soviético insistió en Roma en preparar a fondo la conferencia sobre el Mediterráneo que se celebrará el año próximo en Palma de Mallorca, come, parte del proceso de Helsinki. Este proceso es hoy el gran recipiente en cuyo interior la URSS quiere mezclar todos los ingredientes del futuro europeo. Italia comparte estas ideas.

La URS S quiere que la conferencia de PaIma de Mallorca sea preparada por grupos parlamentarlos y científicos de los diversos países, que el Este y Occidente establezcan contacto sobre los problemas económicos del Mediterráneo y que Italia, Estados Unidos y eventualmente el Consejo de Seguridad de la ONU inicien consultas sobre los problemas de la presencia permanente de las fuerzas navales de la URSS y de Estados Unidos.

El objetivo final de Gorbachov es convertir el Mediterráneo en una zona desnuclearizada y sin buques de las superpotencias, una idea que ha sido acogida con frialdad por la OTAN.

El encuentro con el presidente Bush permitirá "dar un nuevo paso constructivo por la vía de la recíproca comprensión a la interacción en las relaciones soviéticonorteamericanas", dijo Gorbachov, quien insistió en que los cambios en marcha no afectan sólo a Europa del Este, sino que se verifican también en Occidente, están interconectados y se influencian entre sí.

Gorbachov firmó ayer con el presiclente italiano, Francesco Cossiga, un comunicado conjunto tan armónico que parece propio de dos países aliados y no de dos países pertenecientes a bloques diferentes. Entre los acuerdos firmados hay una declaración conjunta para la reconversión de la industria militar a la civil. Se trata del primer acuerdo de este género suscrito por Moscú corrio resultado de su política de desarme. La declaración prevé intercambiar experiencias industriales con vistas a la búsqueda de una producción alternativa, perspectivas de comercialización, problemas sociales y formación de mano de obra.

El líder soviético aparecía más relajado que el día anterior, cuando, según medios soviéticos, llenaban aún su cabeza negros pensamientos sobre los problemas que dejaba en su país y especialmente los que encontrará al llegar, tales como el previsiblemente tormentoso II Congreso de los Diputados Populares.

El asesinato de Herrbausen

Gorbachov y Cossiga condenaron ayer el atentado que costó la vida al presidente del Deutsche Bank, Alfred Herrhausen. El ministro de Exteriores, Edvard Shevardnadze, se entrevistó ayer con el ex rey de Afganistán, Mohammad Zahir Sha, en un intento de buscar una solución política a un problema que sigue aún candente, pese a la retirada de las tropas soviéticas. Los representantes de la URSS subrayan hoy que su país ha dejado de interferir en los asuntos de los demás, y sobre este contexto llama la atención que el secretario de Estado norteamericano, James Baker, quiera que Moscú presione sobre Cuba y Nicaragua para acabar con la ofensiva guerrillera en El Salvador.

[El presidente de EE UU, George Bush, telefoneó ayer al primer ministro italiano, Glullo Andreotti, para que le informara de sus conversaciones con Gorbachov, informa Reuter].

La Prensa italiana comentaba ayer el hecho de que Raisa Gorbachov hubiese venido vestida con un abrigo de lana y no se haya traído ningún abrigo de pieles a Roma, por lo que alguna de las damas arifitrionas habían tenido que renunciar apresuradamente a lucir los suyos.