El Gobierno vasco da luz verde a la autovía Guipúzcoa-Navarra

El Gobierno vasco dio ayer el visto bueno al tramo que le compete del proyecto de la autovía que enlaza Guipúzcoa con Navarra, al calificar de "favorable" el estudio sobre el impacto medioambiental de la citada obra. Éste es el último trámite antes de sacar a concurso las obras, cuyo inicio está previsto para comienzos de 1990. El consejero de Urbanismo, Vivienda y Medio Ambiente, José Miguel Martín Herrera, dijo que el proyecto cumple con creces las exigencias de la CE y de la Administración central, y calificó las reivindicaciones de la Coordinadora Antiautovía de "claramente políticas" más que ecológicas, al pedir una demora de seis meses.

Martín Herrera declaró en este sentido que "las reivindicaciones de la coordinadora tienen un carácter político y, además, una vez entrado ETA en todo el proceso, amenazando a las instituciones, adquiere una gravedad que se resume en el atentado y en la puesta a punto de todas las instituciones del País Vasco. Es decir", continuó el consejero, "no se trata de una apuesta ecológica, sino de una apuesta en contra de todas las opiniones del entramado institucional vasco".E'TA amenazó en un comunicado hecho público el 16 de octubre a los ingenieros, altos técnicos, responsables, y propietarios de las empresas participantes en las obras de la autovía.

La declaración de impacto ambiental del proyecto presentada ayer por el consejero socialista propone de medidas correctoras, exige una serie de informes sobre el posible impacto al patrimonio histórico-artístico de las zonas que atraviesa y preescribe que la dirección de obra deberá contar con una asesoría cualificada en temas ambientales, procedimientos de revegetación y conservación del patrimonio histórico-artístico.

Control medioambiental

El documento limita "al máximo" el uso de pesticidas para el control de la vegetación y además contempla un plan de vigilancia de varias regatas y manantiales, así como el nivel sonoro en las inmediaciones de cuatro zonas en las que hay varios grupos de chalés.El proyecto inicial se ha encarecido en unos 2.000 millones de pesetas, que serán destinados a medidas correctoras del impacto medioambiental, como nuevos túneles en determinadas zonas del valle del, Leizarán, donde todavía quedan plantaciones originarias como el haya. El 90% de ese valle ha sido replantado con pino para el uso industrial. Otros 500 millones se destinarán para eliminar el impacto de los movimientos de tierra necesarios durante el período de las obras.

La autovía contará con dos calzadas en cada sentido, de 3,5 metros de anchura cada una, y con unas pendientes máximas del 6% , de manera que el recorrido entre Pamplona y San Sebastián se efectuará en automóvil en 33 minutos menos que en la actualidad. Los camiones ahorrarán 48 minutos. El trazado se reduce en 7,5 kilómetros, y también se reduce la peligrosidad respecto a la actual vía 240.