La Prensa oficial de la RDA entrevista a un dirigente de la oposición

El partido liberal (LDPD), dirigido por el sorprendente Manfred Gerlach, el más activo de los cuatro partidos satélites del Partido Socialista Unificado (SED, comunista) que tienen asignado un número fijo de escaños en la Cámara del Pueblo de la República Democrática Alemana (RDA), dio ayer una nueva prueba de su decisión de jugar un papel preponderante en el proceso de reforma. El líder aportó a la ampliación de los límites del debate político en curso en el país la publicación en su periódico, Der Morgen, una entrevista con el abogado Rolf Henrich, uno de los fundadores del principal grupo opositor Nuevo Foro.Henrich, que asegura en la entrevista que Nuevo Foro cuenta ya con más de 30.000 firmas y un número superior de seguidores, explica la crisis del sistema por la "falta de estructuras democráticas" en la RDA y reconoce que el clima político en el país "ha cambiado sustancialmente" desde que el pasado día 9, tras los violentos enfrentamientos con que se saldó el 40º aniversario de la fundación del Estado, la policía decidió no intervenir contra los 100.000 manifestantes en Leipzig. El abogado opositor pidió al nuevo líder, Egon Krenz, que amplíe con la máxima rapidez medidas concretas que indiquen a la sociedad que algo está cambiando realmente y que la anunciada reforma no va a quedar en palabras para ganar tiempo.

Las reacciones a la primera medida efectiva tomada por Krenz -la amnistía para los refugiados y la decisión de reinstaurar la posibilidad de viajar a Checoslovaquia sin necesidad de visado- han sido optimistas. Una de las fundadoras de Nuevo Foro, la escritora Barbel Bohley, hizo pública ayer su satisfacción por que el Gobierno haya ofrecido por fin "algo concreto". No ha sucedido lo mismo entre las decenas de miles de refugiados en la RFA, que descartan la oferta de regresar a la RDA.

[Varias decenas de miles de opositores al régimen de la RDA se manifestaron ayer en varias ciudades del país para pedir elecciones libres y una reducción del aparato estatal, informa Efe. Los manifestantes pedían en sus pancartas "no más palabras, queremos obras"].