España aportará 600 millones al presupuesto militar de la OTAN

España asumirá desde el próximo año el 3,5% del presupuesto militar de la OTAN. La contribución española, que oscilará entre 550 y 600 millones de pesetas, será aprobada hoy, "finalizado el procedimiento de silencio", según fuentes de la Alianza Atlántica.La decisión supone un paso clave en la integración de España en la OTAN, que se completará con la participación en 1991 en el presupuesto de infraestructuras y con la firma de los acuerdos de coordinación de tropas, cuya negociación marcha más lenta que lo previsto por Defensa.

La aprobación de la cuota española en el presupuesto militar se formalizará hoy de una manera automática. La ausencia de objeciones por parte de los aliados dentro del plazo fijado por la OTAN ("procedimiento de silencio") elimina el último obstáculo. La cuota exacta será fijada, no obstante, a finales de diciembre, cuando el Consejo de la Alianza Atlántica concrete el presupesto militar del próximo año, pero, según fuentes del Gobierno, la contribución española "oscilará entre 550 y 600 millones".

De acuerdo al modelo negociado de no participación en las partidas que dependan del mando militar integrado, la aportación española estará limitada al Estado Mayor Internacional (IMS), al programa de mando y control aéreo (ACCS), a varias agencias del Comité Militar, al Colegio de Defensa de la OTAN en Roma, a los sistemas de comunicación e información y al presupuesto para los ejercicios militares en los que tomen parte tropas españolas.

Hasta ahora, España sólo participaba en el presupuesto civil de la OTAN con 455 millones de pesetas al año, un 3,5% del total. El siguiente paso será la negociación del presupuesto de infraestructuras, al que está previsto integrarse en 1991. La estimación del coste en este caso es de más de 6.000 millones al año.

Si la integración financiera en la Alianza Atlántica marcha a buen paso, la coordinación de fuerzas camina con retraso. El ministro de Defensa, Narcís Serra, anunció hace unos meses que los borradores de los dos primeros acuerdos de coordinación militar -el de defensa aérea y el de operaciones en el Atlántico oriental- deberían haber estado concluidos en junio, de forma que su aprobación fuera posible en noviembre.

Jaime Ojeda, el embajador ante la OTAN, entiende que "la imposición de un modelo idéntico al francés de coordinación fuera del mando integrado complica el procedimiento, pero no se puede decir que las conversaciones se hayan desviado del camino previsto".