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Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

Distorsiones salvadoreñas

Tras haber leído su editorial del pasado sábado 16 de septiembre acerca del diálogo emprendido entre el Gobierno de El Salvador y el FMLN, a instancias de este último, nos vemos en la obligación de comunicarle que contiene una serie de olvidos e inexactitudes contribuyentes a dar una imagen totalmente distorsionada de la realidad política que vive y sufre actualmente el pueblo salvadoreño.

1. Permítanos recordarle que tal diálogo, si bien implícito en la cumbre de presidentes centroamericanos, fue posible gracias a la actitud negociadora del FMLN, el cual presentó, el 26 de enero de 1989, una seria y realista propuesta de paz, rechazada inicialmente por el entonces presidente Napoleón Duarte, alegando para ello la inconstitucionalidad de esta oferta, y reconsiderada de nuevo por el mismo Gabinete casualmente a los pocos días después de la visita que hiciera a El Salvador el vicepresidente norteamericano, Don Quayle; es aquí, en esta serie de acontecimientos, donde se encuentra el origen del proceso negociador al que usted alude en su editorial.

2. Seguidamente quisiéramos subrayar que no fue la enfermedad padecida por Napoleón Duarte la que produjo el hundimiento de la Democracia Cristiana, como se afirma en su artículo, sino el fracaso del proyecto contrainsurgente norteamericano, que se reveló incapaz de poner fin a la guerra civil venciendo a la guerrilla e incapaz también de consolidar a los democristianos como fuerza política centrista y gobernante, en el marco de una democracia descafeinada y manejable desde la Casa Blanca.

3. Le puntualizamos que el Gobierno de Cristiani no dista nada en absoluto del partido que fundara Roberto d'Aubuisson sino que constituye el apéndice legal en el poder político de los tristemente famosos escuadrones de la muerte, como así lo demuestran el recrudecimiento de la represión y la guerra, así como su negativa a reformar el aparato de la justicia y juzgar al mayor D'Aubuisson.4. Por último, quisiéramos apuntar el hecho de que, si bien en toda guerra siempre hay víctimas inocentes y abusos, existen cintas de vídeo en las que se puede observar cómo el FMLN devuelve prisioneros de guerra, en perfecto estado físico y mental, bajo la presencia y supervisión de miembros de la Cruz Roja y la Iglesia católica.

Señor director: si de verdad le interesa el pueblo de El Salvador en tan dramático momento de su historia, trate de ser más objetivo a la hora de elaborar artículos de opinión sobre el tema-

Miembros del Comité de Solidaridad con América Latina. Leganés, Madrid.

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