"Tiananmen será hoy como la plaza de Oriente"

JOSÉ A. SOROLLA El 40º aniversario de la fundación de la República Popular China tiene hoy un aspecto inédito. Por primera vez desde 1949 existe una disidencia organizada, la Federación por la Democracia en China (FDCh), fundada la semana pasada en París. La preside Yan Jiaqi, un historiador de 47 años, de aspecto frágil, cuya energía se expresa en su reivindicación de la vigencia de la primavera de Pekín.

Antiguo director del Instituto de Estudios Políticos de Pekín, Yan estuvo tres horas en la plaza de Tiananmen el 4 de junio, día de la matanza, "pero eso no tiene importancia", dice. Autor de una historia de la Revolución Cultural, de su libro, que pronto se publicará en inglés en Hawai, se editaron en China 800.000 ejemplares, pero su venta pública estaba prohibida y únicamente se permitía su distribución en "círculos restringidos", aunque esta palabra no tenga el mismo valor en China que en Occidente.Durante un año, entre 1986 y 1987, Yan formó parte de un comité, presidido por Zhao Ziyang, entonces secretario general del Partido Comunista Chino (PCCh), y encargado de acelerar las reformas políticas. En la sede de la FDCh en París, horas antes de desplazarse a la República Federal de Alemania (RFA), el líder de la disidencia expresa su admiración por Zhao: "Al menos era un reformista, y sobre todo tenía una actitud de simpatía hacia los estudiantes", pero se niega a confesar si era comunista cuando colaboraba con el régimen y si lo sigue siendo ahora. "Tenía confianza en que el PCCh", se escabulle, "podía conducir una reforma política y democrática, que se ha perdido después de la represión, y a causa de ello hemos creado un frente de resistencia".

Pregunta. ¿Cómo y cuándo salió de China?

Respuesta. Es un poco inoportuno decirlo. He contado con la ayuda de varios amigos chinos y extranjeros, pero no puedo concretar. Ha sido muy peligroso.

Contra el pueblo desarmado

P. Usted ha dicho que la represión de la primavera de Pekín ha sido peor que la Revolución Cultural. ¿Por qué?

R. Durante la Revolución Cultural hubo un enfrentamiento entre dos partes que, aunque mal, estaban armadas. Esta vez, sin embargo, ha sido verdaderamente la represión del Gobierno sobre un pueblo completamente desarmado.

P. ¿Cuántas víctimas hubo en Tiananmen?

R. Oficialmente se habla de unos 200. Según mis cálculos, hubo más de 2.000.

P. El régimen chino conmemorará este domingo su 40º aniversario con un baile en Tiananmen en el que soldados y estudiantes danzarán juntos. ¿Qué le dice eso después de la matanza?

R. Será un baile como el que podría haber en un campo de concentración. Voy a escribir un artículo sobre este tema en una revista de Hong Kong. La gente participará porque no hay medios para oponerse. Por hacer una comparación, es como en la época de Franco en España. En China no hay libertad, y la represión está muy individualizada. Por eso conseguirán que la gente participe.

P. En España se decía que Franco llenaba una plaza, la plaza de Oriente, porque existía la dictadura. ¿Es el mismo caso?

R. Sí.

P. ¿Cuál es la fuerza, de la FDCh en el interior de China? ¿Cuáles son sus objetivos?

R. Por el momento, nuestra organización está constituida en Estados Unidos, Japón, Francia, el Reino Unido, la República Federal de Alemania y Australia, y hay también un pequeño grupo de militantes en Suecia.

P. ¿Cuáles son sus proyectos sobre Taiwan?

R. La unificación de China es necesaria. Tengo esperanzas de que la unificación refuerce el movimiento democrático en el interior de China.

P. ¿Admite la FDCh militantes de Taiwan?

R. Sí. Todos los chinos, de Taiwan o de ultramar que quieran participar pueden hacerlo.

P. ¿Cómo valora la perestroika de Gorbachov? ¿Cree qué su visita a China fue utilizada por los estudiantes?

R. La reforma económica en la URSS ha superado a Stalin, pero Gorbachov no ha roto completamente la vía económica indicada por Stalin porque existe todavía la economía planificada. Por lo demás, es cierto que los estudiantes utilizaron su visita para dar a conocer al mundo lo que pasaba, aunque Gorbachov no estaba de su lado.