Por un puñado de dólares
Hablar de la vuelta a los escenarios de los Rolling Stones es hablar inevitablemente de grandes cifras. A estas alturas de su carrera, el grupo no puede prescindir del lujo y el dinero, pero quienes les conocen bien aseguran que tampoco pueden soportarlo.Tal vez para aliviar estas complicadas luchas interiores han decidido embolsarse un millón de dólares cada uno por noche de actuación (más de 120 millones de pesetas por tres horas escasas de trabajo). Lejos quedan los penosos días en que apenas cobraban cinco dólares por concierto, en el comienzo de los años sesenta.
Importante oferta
Hace cuatro meses, Bill Graham, apoderado hasta entonces habitual de los Stones, puesto que organizó las giras de los años 1978, 1981 y 1982 por Europa y Estados Unidos, les hizo una importante oferta para su nueva gira por Norteamérica: 60 millones de dólares (más de 7.300 millones de pesetas) por 50 conciertos en Estados Unidos y Canadá. Su respuesta fue negativa, debido a que tenían una oferta sorpresa aún más jugosa: el promotor canadiense Michael Cohl les prometió 10 millones de dólares (aproximadamente 1.220 millones de pesetas) más que Graham. Mick Jagger y Keith Richard, cerebros musicales y también económicos del grupo, no dudaron ni un momento. Los beneficios que el grupo británico percibirá por su gira superarán los 8.500 millones de pesetas. Por algo dicen que esta reunión de los Rolling Stones no la han fijado los propios miembros del grupo, sino los directores de sus respectivos bancos al ver disminuir peligrosamente sus cuentas.
La nueva gira del grupo tenía que comenzar necesariamente en Estados Unidos. En este país han vendido 23 millones de elepés, han colocado 13 álbumes en el top 10 y han conseguido cinco discos de platino y ocho de oro. Se calcula que casi 3,5 millones de personas van a poder verles en directo durante esta gira sólo en Norteamérica, donde ofrecerán 41 conciertos en 36 ciudades.
A la hora de cerrar esta edición, ya sólo quedan unos pocos cientos de entradas para los recitales de Louisville, Syracuse y Jacksonville. Un éxito total que destaca aún más cuando lo comparamos con los oscuros retornos de otras teóricas grandes estrellas, como los ex Beatles Ringo Star y Paul McCartney, Bob Dylan y grupos como The Jefferson Airplane, Yes y The Who.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.