Los 'verdes' italianos proponen una ley para plantar un árbol, por cada nuevo niño
Los ayuntamientos italianos deberán plantar un árbol por cada niño que nazca, si prospera la propuesta de ley presentada al Parlamento por los verdes y que lleva la firma del diputado Francesco Rutelli. El proyecto tiene mucha probabilidad de ser aprobado en septiembre, ya que a pesar del desierto político de agosto la iniciativa ha recibido enseguida el consenso y las firmas de diputados de casi todos los partidos: democristianos, republicanos, comunistas, independientes de izquierda, liberales y socialdemócratas. Y se espera que pronto firmen los socialistas.
La operación ha sido ya titulada "el árbol del recién nacido" y ha hecho el milagro de poner de acuerdo, en nombre de la ecología, a todas las fuerzas políticas del Gobierno y de la oposición.
"Creo que es de un enorme valor civil y moral que cada niño o niña que ve la luz de esta tierra", ha afirmado Rutelil en el Parlamento, al presentar la ley en nombre de su partido, "crezca junto a un árbol en el jardín de su propia ciudad o pueblo y que puedan crecer así generaciones de plantas íntimamente unidas a generaciones de niños".
Que paguen los fumadores
La propuesta de ley pide que el coste de la operación sea pagado por los fumadores, mediante un ligero aumento del precio del tabaco. En el espacio de 90 días a partir del nacimiento de un nuevo niño o niña, el ayuntamiento estará obligado a plantar un árbol indicando el lugar exacto en el que ha sido colocado y a qué niño pertenece. Se le ha llamado ya "el bautismo verde", comparándolo con el bautismo religioso. Y así, cuando el niño tenga capacidad para entender el hecho y la simbología de dicho árbol "que nació con él", pueda ir a verlo, a regarlo y cuidarlo.
