El fin de una época

El director de orquesta austriaco Herbert von Karajan murió ayer de un fallo cardiaco, a la edad de 81 años, en SaIzburgo, su ciudad natal, tras una larga historia de problemas de la columna vertebral que desde hace algún tiempo dificultaban sus movimientos. Aun así, este hombre, de extraordinaria vitalidad, estaba dispuesto a inaugurar el próximo 27 de julio los Festivales, de Verano de Salzburgo, dirigiendo a la Filarmónica de Viena. Criticado y admirado, envidiado y amado, Karajan está considerado como el más importante director de orquesta de la posguerra.

La muerte del director salzburgués ha causado honda impresion en el mundo musical. Alfredo Kraus, que se encontraba ayer en Barcelona manifestó: "He cantado bajo su dirección en Salzburgo en dos ocasiones, en 1967 y 1968, en una producción del Don Giovanni de Mozart. No he cantado en más ocasiones, porque significa ir a Salzburgo y esto coincide con mis vacaciones. Recuerdo que, en 1968, cuando Karajan se enteró de que al año siguiente no acudiria a Salzburgo, se mostro aterrorizado y me preguntó por qué. "Estoy de vacaciones, maestro", le dije. Y Karajan me respondió: "pero yo le puedo mandar un avión que le traerá hasta aquí", a lo que yo me negué, porque mis vacaciones son sagradas. Era un hombre extraño, un gran músico y un gran director de orquesta. Jamás tuve ningún problema con él, porque era un gran conocedor de la voz humana y se adaptaba con gran facilidad a los cantantes. Considero que era un hombre autoritario, pero siempre fuera del escenario. Como director de orquesta, era una persona muy inteligente que sabía perfectamente amoldarse a las necesidades de los cantantes. Siento mucho su muerte y estimo que Karajan ha marcado una época en la historia de la dirección de orquestas".Virtuosismo

Rafael Frühbeck de Burgos también dio a conoce su opinión: "Con la Filarmonica de Berlín, Karajan ha creado un instrumento con el que ha alcanzado ideales sonoros y virtuosísticos dificiles de igualar. Lo conocí hace muchos años durante una estancia mía en Grecia y en varias ocasiones nos saludamos. Era un director muy apreciado en el mundo de la música y uno de los grandes maestros del siglo XXII.

El -Compositor Xavier Montsalvatge valoró la carrera de Karajan y su memoria musical: "Von Karajan ha sido el primer director de nuestro tiempo por varias razones, en especial por su musicalidad que ha puesto a prueba en infinidad de ocasiones. Una vez le escuché en Lucerna un concierto de Bach en el que interpretaba la parte de elavicembalo; después -en este mismo concierto-, dirigió una sinfonía de Mahler, y todo de memoria. Tuve noticia de que al día siguiente, dirigió en Viena la ópera Boris Gudonov, de Musorgski, también de memoria. Fue un músico prodigioso y logró que le reconocieran una autoridad como ningún músico ha logrado en nuestro tiempo. Multiplicaba los ensayos y exigía el máximo de las orquestas que dirigía. Fascinaba tanto a los músicos como al público".