Hacienda concentrará el cobro de deudas en las superiores a un millón de pesetas y en las más recientes
Los morosos con Hacienda que no superen una deuda de un millón de pesetas y los que tienen deudas que vienen de tiempo atrás pueden darse un respiro, de acuerdo con el plan de recaudación para este año, presentado ayer. Pero según explicó el secretario general de Hacienda, Jaime Gaiteiro, "nadie puede albergar por ello la esperanza de una amnistía fiscal". Según los datos de recaudación, durante el año 1988 se han realizado algo más de un millón de certificaciones de descubierto, por importe de 407.392 millones de pesetas, aunque sólo se han ingresado 16.516 millones.
La dificultad de conseguir el cobro de deudas tributarias mediante actuaciones generalizadas ha llevado a los responsables de Hacienda este año a cercar el problema en los que deben más de un millón de pesetas y en aquellos cuyo vencimiento esté más próximo. Esto no significa, según Jaime Gaiteiro, que los deudores que no estén dentro de este colectivo vayan a librarse de pagar a Hacienda. "Sólo se trata de dar un trato preferente a las deudas superiores al millón y a las que se hayan detectado más recientemente". No se especificó a partir de que "antigüedad" se ha decidido actuar.La concentración en deudas superiores al millón de pesetas se explica por los últimos datos sobre las cantidades pendientes de cobro. Así, un 77% de las certificaciones son inferiores a 100.000 pesetas y representan el 4% de las deudas (14.798 millones de pesetas), mientras que un 6%. son superiores al millón de pesetas y representan el 85% del importe pendiente de pago (297.015 millones de pesetas). En cuanto a la antigüedad, se ha decidido actuar sobre las deudas de vencimiento más próximo "dado que las posibilidades de cobro disminuyen en relación directa con su antigüedad".
Jaime Gaiteiro informó ayer que se han dado instrucciones a la Inspección de Hacienda para que, cada vez que se levante un acta, se incluya un informe con destino a las unidades de recaudación en el que se señalen los bienes que pueden ser embargables, "sobre todo en los casos en que se tenga la sospecha de que va a ser difícil que el deudor pague".
Según los datos presentados ayer sobre deudas pendientes de cobro durante el año pasado, las certificaciones de descubierto ascienden a 1,027 millones y el importe adeudado es de 407.392 millones de pesetas. El mayor número de certificaciones se ha levantado en Cataluña (322.823), seguido de Andalucía (162.227) y Madrid (32.323). En cuanto al importe de la deuda, la mayor cantidad corresponde también a Cataluña (93.025 millones de pesetas), Andalucía (40.707 millones) y Madrid (32.743 millones).
Por impuestos, en el IRPF se concentra el mayor volumen (165.610 certificaciones y 45.064 millones de deuda); el IVA (20.428 y 12.540 millones), el antiguo ITE (7.456 y 23.213 millones), sociedades (7.299 y 12.671 millones) y "otros" (146.889 y 38.755 millones).
Del total de certificaciones recibidas por las unidades de recaudación se ha actuado sobre 297.089 casos (un 29% del total) por importe de 55.482 millones de pesetas (un 14% del total). De esta cantidad, se ha conseguido ingresar en Hacienda 16.516 millones de pesetas, que corresponden en su mayor parte a las certificaciones emitidas durante el pasado año. Este escaso resultado se justifica, según Hacienda, porque el nuevo sistema de recaudación -embargos de cuentas corrientes- no se ha puesto en marcha hasta después del mes de septiembre. Estos embargos se han producido en 43.579 casos.
En cuanto al fraude detectado en pólizas de seguro con prima única, el secretario general de Hacienda señaló que no se descarta pedir las listas a las aseguradoras en base a las resoluciones del TEAC, sin esperar a que se pronuncie la Audiencia Nacional. Hasta ahora no se ha hecho "para evitar nuevos recursos".
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