Castro: "Déjenos seguir con el socialismo"
"Si otros países socialistas quieren construir el capitalismo, allá ellos, no hay inconveniente, pero déjennos a nosotros seguir con el socialismo". Este fue el mensaje que Fidel Castro transmitió al máximo dirigente soviético, Mijail Gorbachov, ante la mirada atenta de todo el mundo. Tres besos y un fuerte apretón de manos entre ambos, en el aeropuerto José Martí de La Habana, sirvieron ayer para decir que, a pesar de las diferencias, la Unión Soviética y Cuba mantienen su alianza.
Al término de una visita de cuatro días a Cuba del jefe del Estado de la URSS, Mijail Gorbachov, el órgano oficial del Partido Comunista Cubano, Granma, destacaba ayer en primera página a grandes titulares las frases que constituyen la esencia de las relaciones cubano-soviéticas en este momento."Lo principal", dijo Gorbachov en su discurso de la tarde del martes ante la Asamblea Nacional, "es que nuestros pueblos están unidos por una sincera amistad, por una profunda simpatía mutua y por un genuino interés mutuo por sus asuntos". "Ambos países", manifestó Castro en el mismo foro, "ambos partidos, parten de los mismos principios: los principios de la aplicación del marxismo-leninismo a las condiciones concretas de cada país".
Mijail Gorbachov y Fidel Castro han reconocido sus profundas diferencias sobre la concepción del socialismo en la actualidad, las han hecho públicas y las han ratificado contundentemente, pero, al mismo tiempo, confesaron su respeto mutuo y el interés de los dos por permanecer unidos.
Morbosidad
Decían estos días los funcionarios cubanos en La Habana que los periodistas que venían, morbosamente, a presenciar un duelo entre Castro y Gorbachov se vuelven a sus países decepcionados. Esa afirmación no es tan cierta. No se ha producido, desde luego, un enfrentamiento entre los dos dirigentes, pero sí se ha confirmado la realidad de que Castro y Gorbachov representan y defienden hoy opciones políticas distintas, ortodoxa el primero y reformista el segundo. Castro cree en la disyuntiva marxismo-leninismo o muerte; Gorbachov piensa que hay otra alternativa, la perestroika.
Defienden ideas distintas, por cierto, en condiciones muy desiguales. Mientras que Gorbachov dedicó ocho páginas de su discurso a exponer los términos de la perestroika, Castro, a la defensiva, insistió en la necesidad de que se respete el derecho de cada país socialista a elegir su camino, para lo que no tuvo escrúpulos en decir que "si un país socialista quiere construir el capitalismo tenemos que respetar su derecho a construir el capitalismo".
Fidel Castro, lo mismo que Gorbachov, sólo hizo una pequeña referencia al proceso de rectificación que se desarrolla en Cuba, que, pese a que oficialmente se trata de comparar con la perestroika supone, en realidad, la insistencia en conceptos centralistas y autoritarios que divergen de la actual línea soviética. Sentado el principio de la divergencia -"¿cómo se puede suponer que las medidas aplicables en la URSS sean exactamente las medidas aplicables en Cuba?, es una locura", dijo Castro, "hoy pueden contar con el éxito los que marchan al unísono con el tiempo y sacan las conclusiones necesarias de los cambios", dijo Gorbachov-, los dos gobernantes se han dedicado a desmentir las especulaciones sobre una ruptura entre Cuba y la URSS.
El mejor argumento de que la alianza estratégica se mantiene es la firma de un tratado de amistad y cooperación que garantiza relaciones estrechas entre los dos países para los próximos 25 años. Castro dijo que el tratado fue iniciativa de los soviéticos y que supone "la mejor respuesta a todas las murmuraciones y a todas las intrigas".
Gorbachov, por su parte, afirmó que este acuerdo "consolida lo que ya pasó la prueba del tiempo y abre nuevos horizontes ante la colaboración soviético-cubana en la política, la economía y la cultura". El texto del tratado afirma que Cuba y la URSS han decidido la firma de este convenio "partiendo de sus relaciones de fratema e indestructible amistad y solidaridad, basadas en la comunidad de ideología, la doctrina del marxismo-leninismo y el internacionalismo y en la identidad de objetivos, la edificación del socialismo y el comunismo".
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