Un 66% de los potenciales inversores en España eligen Barcelona frente a Madrid para instalar sus empresas

El aislamiento de Madrid del mercado europeo, los deficientes servicios públicos y el caos de los sistemas de transporte y la excesiva burocracia son las principales dificultades con que tropieza Madrid para convertirse en una ciudad atrayente para los inversores. Estos resultados se han obtenido a través de dos encuestas que Promadrid ha realizado entre 275 personalidades del mundo de los negocios, prensa extranjera, instituciones de la CE y agentes financieros de Europa, América y Asia. Barcelona es preferida por las dos terceras partes de los encuestados como lugar donde invertir en España, aunque Madrid es la tercera ciudad europea, tras París y Londres, preferida como lugar de residencia.

Promadrid, empresa pública cuyo objetivo es fomentar la colaboración entre la administración y los particulares para la promoción de la ciudad, ha preparado un Plan Estratégico para trazar las perspectivas que se le ofrecen a Madrid de cara al año 2.000.El Plan Estratégico trata de conocer las actuales tendencias económicas, demográficas y sociales, en su contexto nacional e internacional, perfilar el futuro previsible para Madrid, concretar sus aspectos atractivos y, a partir de ese panorama, seleccionar los problemas más relevantes y diseñar las acciones para resolverlos, para lo que buscará la opinión y colaboración de las entidades ciudadanas, empresariales, sindicales y otros agentes sociales.

A través de los estudios realizados sobre cinco grandes temas (fragmentación social; suelo y actividad económica; transportes y comunicaciones; futuro de la economía madrileña y habitabilidad e imagen de Madrid), los expertos de Promadrid ha llegado a la conclusión general siguiente: "Madrid es una ciudad que tiene casi todo para presentar un futuro halagador, siempre y cuando se eliminen los estrangulamientos que la están condicionando".

El borrador del Plan Estratégico será presentado al consejo de administración de Promadrid en la reunión convocada para el próximo miércoles. Eugenio Royo, consejero de Economía regional, y el alcalde, Juan Barranco, forman parte del consejo, entre otros.

Los factores cruciales que se barajan para decidir la localización de instalación de empresas son por orden de prioridad, el acceso fácil al mercado europeo, la disponibilidad de la mano de obra especializada, el buen ambiente de negocios y los bajos impuestos.

Entre los encuestados se pueden citar al American Express Bank Limited, Abbott Laboratories SA, Banca Comerciale Italiana, Chase Manhattan Bank España, Financial Times, Mercedes Benz SA, Mitsubishi, Upjhon y Texaco Canarias SA, entre otros muchos.

Pros y contras

Varias respuestas mencionaban también como factores importantes la presencia de la Universidad -que en el caso de Madrid se considera muy deficiente-, existencia de servicios públicos eficaces, buenas infraestructuras, mercado en crecimiento, costes razonables para instalar oficinas y locales comerciales, etcétera. Sólo el 8,4% de los encuestados opinan que Madrid cumple estos factores de localización de empresas, mientras que un 14,5% considera que Barcelona los cumple también. En la competencia entre Barcelona y Madrid, un 66% elegiría Barcelona para instalar su empresa, y sólo un tercio Madrid. Sin embargo, es curioso constatar que las opiniones negativas se dan sobre todo entre quienes no conocían directamente Madrid. El 88% de los encuestados que ya están instalados en Madrid se encuentran satisfechos, contra un 2% que lamenta su elección.Para los encuestados, Madrid disfruta de un buen ambiente para hacer negocios, y la calidad de vida es satisfactoria, así como los costes de la mano de obra e incluso de la instalación de oficinas entran en el marco de lo razonable. Las opiniones mayoritarias marcaron el futuro de Madrid en el área turística -un 68% de los encuestados-, seguida por los sectores de finanzas y negocios -60%,-, ferias y congresos -55%-, y cultura y ocio -43%-. "Es especialmente preocupante", se dice en las conclusiones, "que Madrid se encuentre al margen de todos los proyectos de vertebración europea en materia de comunicaciones".

Sin embargo, los criticados presentan como factores negativos los siguientes: las condiciones de contratación de mano de obra, que son particularmente restrictivas; las comunicaciones, sector en el que Madrid está en situación crítica en sistemas de transporte y telecomunicaciones; inadecuación de las regulaciones sobre el control del cambio; deficiencias en las comunicaciones aéreas y otros aspectos menores.