El Teatre Lliure suspende sus actividades por problemas económicos

El Teatre Lliure de Barcelona ha decidido suspender toda actividad pública y cerrar el local hasta que las instituciones pongan los medios para que el teatro pueda superar la grave crisis económica que atraviesa. El presupuesto 1988-1989 del Lliture contempla un déficit de 200 millones de pesetas. Fabià Puigserver, responsable del Lliure, anunció ayer en una conferencia de prensa que si el 1 de febrero, fecha prevista para el estreno del próximo espectáculo del teatro, Les noces de Figaro, no se ha llegado a una solución, la pieza no llegará a representarse y se suspenderá la temporada.

Puigserver señaló que el problema de tesorería es tal "que no podré pagar a la gente a fin de mes" y amenazó con "cerrar definitivamernte" las puertas de este, teatro, considerado como la mejor y más importante cantera del teatro hoy en España. Fabiá Puigserver recordó que en octubre ya se hizo llegar una memoria a las tres instituciones que subvencionan al Lliure a raiz de un convenio -Generalitat, Ayuntamiento y Diputación de Barcelona- en la que se les informaba del grave problema presupuestario del teatro y de la necesidad de que aumentaran sus respectivas aportaciones. "Se les señaló que era un tema de absoluta urgencia y hoy, a 19 de enero, en plena temporada, estamos igual: subterfugios y no hay ningún compromiso real para dotar al Lliure con lo que precisa".Para Puigserver, que habló con amargura y crispación, se trata principalmente de una 'Talta de voluntad política de apoyar al Teatre Lliure". "Con esta actitud", dijo, "se está maltratando a un teatro, a unos profesionales y a un público".

Suspensión

"Como primera medida", continuó, "hemos decidido suspender las actividades públicas del Lliure; continuaremos ensayando el nuevo espectáculo, pero si antes del día del estreno no hemos tenido una respuesta satisfactoria por parte de la administración éste no tendrá lugar. No estrenaremos Les noces de Figaro y suspenderemos la temporada: el Lliure cerrará definitivamente sus puertas".Puigserver aseguró que los problemas de tesorería le impedirán pagar a la gente este mes "y dentro de poco tendré que despedir a todo el personal e ir a Magistratura". "Aún hay unos días de plazo para tomar decisiones; yo no soy tozudo y estoy dispuesto a negociar siempre y cuando se concreten medidas reales".

Puigserver cuantificó en unos 200 millones (más una partida para infraestructura) las necesidades económicas del Lliure, cantidad de la que cabría descontar los 80 millones de subvención por el convenio firmado con las tres instituciones.

El Lliure reclama que esas aportaciones se íncrementen de la manera siguiente: Generalitat, de 42 a 117 millones; Ayuntamiento, de 21 a 58, y Diputación, igualmente, de 21 a 58. Puigserver insistió en que nadie le ha discutido estos números.

El director vinculó la crisis del teatro a "las trabas a nuestro proyecto de futuro, también en suspenso y estancado por falta de interés institucional". Puigserver declaró que la Generalitat podría haber solucionado los problemas del Lliure "accediendo a nuestra propuesta para gestionar el teatro Romea".