Polémica sobre el impacto sanitario de las pantallas de ordenador

El trabajo continuado varias horas por día durante algunos años frente a una pantalla de un ordenador no es causa de ningún trastorno o cambios en la piel. En cambio, quienes trabajan en tales condiciones experimentan a menudo diversas molestias de las que no han podido encontrar evidencias.Esta es la conclusión de una amplia investigación efectuada en el Instituto Carolino de Estocolmo y que abarcó a 3.745 personas que habitualmente están expuestas al campo magnético de la pantalla de un ordenador.

El profesor Sure Liden y el doctor Mats Berg, del mencionado instituto de investigación, presentaron las conclusiones de su investigación, que fue realizada a propuesta de la Organización Central de Funcionarios y el Fondo del Medio Ambiente Laboral.

La organización sindical proporcionó la materia prima de la encuesta, consistente en el personal de 36 empresas de diferentes ciudades del país. De ellas se seleccionaron 809 personas al azar para una entrevista sobre ambiente laboral, uso del cigarrillo, uso de jabones y cosméticos más un examen médico, las que fueron contrastadas con un grupo de control que no trabaja con pantallas de ordenadores. La conclusión de los mencionados investigadores es de que no existen evidencias de las molestias que muchas personas aducen y de que tampoco hay diferencias en los resultados entre uno y otro grupo.