La Comunidad Europea Moquea la exportación de cereales españoles

La Comunidad Europea no ha concedido restituciones para la exportación de cebada española desde el pasado mes de octubre con el fin de eliminar los excedentes previstos en el mercado interior. Para los operadores que actúan en el sector, esta posición de rechazo se considera como una actuación de bloqueo, mientras no se han paralizado las ayudas para las exportaciones de cebada procedentes del resto de los doce.

Con una producción de cereales en torno a los 22 millones de toneladas, de las que 12 millones corresponden a cebada, la Administración española consideró necesaria la exportación de 1,5 millones de toneladas a lo largo de toda la campaña para mantener unos niveles aceptables de precios. Ante las peticiones españolas, la CE estimó la posibilidad de dar ayudas para un total de 800.000 toneladas.En el resto de los países comunitarios, las previsiones para las exportaciones de cebada se fijaron entre los nueve y los diez millones de toneladas.

Prácticamente a los seis meses del inicio de la campaña, el ritmo de las exportaciones ha tenido un tratamiento totalmente diferente para España y el resto de los países de la CE. En la Comunidad, frente a las exportaciones previstas para exportar, las ventas realizadas hasta este momento ascienden a 6,5 millones de toneladas. Durante él mes de noviembre, las autorizaciones tuvieron un ligero estancamiento, para reanudarse de nuevo la pasada semana con 580.000 toneladas, lo que supone prácticamente el 70% de las cantidades previstas.

En España, la situación es completamente distinta. Frente a unas previsiones de exportación que ascendían a 1,5 millones de toneladas, sólamente se han concedido restituciones para vender en el exterior 407.000 toneladas. La Comunidad no aprueba restituciones para exportar cebada desde hace mes y medio, lo que supone perder la posibilidad de competir en esos mercados con materia prima francesa o británica. Para los operadores españoles, llegar a las cifras de 1987 va a resultar muy difícil, salvo que se decidan actuaciones especiales. Durante las últimas semanas, el bloqueo se justificaba por el interés de la Comisión para esperar a una recuperación del dólar y una mayor estabilidad en los mercados internacionales. Pasado ese período, se critica que la Comunidad aplique medidas diferentes para el cereal español y al producido en el resto de la CE.

Las exportaciones de cereales españoles tienen este año un volumen muy inferior al de 1987 por las mismas fechas. En la campaña anterior fueron posibles las exportaciones de trigo al inicio de la recolección por un volumen de unas 600.000 toneladas. Igualmente se exportaron unas 400.000 toneladas de maíz, cantidades que no se han podido exportar este año ante la peor calidad.

La Administración tiene previsto solicitar ayudas especiales en Bruselas para la exportación como mínimo de unas 400.000 toneladas de maíz con el fin de estabilizar los mercados.