Los comunistas niegan su apoyo al PSOE para aprobar los presupuestos municipales de Barcelona y Sevilla

Los concejales comunistas en los ayuntamientos de Barcelona y Sevilla mostraron ayer su rechazo a los respectivos presupuestos municipales de 1989, para cuya aprobación los socialistas, en el poder en ambas capitales, necesitan su apoyo. Los dos concejales comunistas de Iniciativa per Catalunya (IC) obligaron al alcalde de Barcelona, Pasqual Maragall, a retirar el presupuesto para el año entrante del orden del día del pleno. En Sevilla, donde el PSOE consiguió aprobar el presupuesto del presente ejercicio gracias al apoyo de Izquierda Unida, el concejal de esta coalición Luis Pizarro reiteró la "poca predisposición" de su grupo para apoyar el proyecto.

El grupo comunista en el Ayuntamiento de la capital catalana amenazó con votar en contra del proyecto tras fracasar las negociaciones con el grupo socialista paria incluir en el presupuesto para 1989 diversas inversiones que IC considera "irrenunciables". El principal motivo de fricción entre los dos grupos coligados en el equipo de gobierno municipal es la cobertura de uno de los cinturones que en 1992 configurará el nuevo anillo viario de Barcelona. Mientras los socialistas consideran suficiente una cobertura del 60%, IC pide que los tramos cubiertos sean más extensos.La obra está financiada por la Greneralitat y el Ayuntamiento deberá realizar una inversión complementaria de 800 millones de pesetas, ya que la cobertura no estaba prevista en el proyecto original. El grupo socialista, que cuenta. con 21 concejales, necesita los (los votos de IC para disponer de la mayoría absoluta. Convergència i Unió (CiU) tiene 17 concejales y AP, tres.

La oposición de los comunistas al proyecto presupuestario de 1989 pone el pacto de gobierno del Ayuntamiento de Barcelona al borde de la crisis. Durante el pleno, los comunistas intentaron minimizar la trascendencia política de su posición y se manifestaron dispuestos a llegar a un acuerdo con Maragall. Por su parte, los socialistas exigieron a IC una mayor corresponsabilidad en la labor de gobierno.

Aunque los socialistas no se han manifestado por la ruptura del pacto con los comunistas -lo que les obligaría a gobernar en minoría-, miembros del equipo de Pasqual Maragall consideraron "insostenible seguir colaborando con un grupo que pretende ser, a la vez, gobierno y cposición".

"Bajos ánimos"

Por su parte, el concejal de Izquierda Unida en el Ayuntamiento sevillano, Luis Pizarro, comentaba ayer los "bajos ánimos" de su grupo para alcanzar un pacto global sobre el presupuesto del año próximo, que fue presentado ayer por el primer teniente de alcalde, Francisco Moreno.Todos los grupos de la oposición, que forman mayoría frente al PSOE, han mostrado su rechazo inicial al proyecto. El grupo socialista necesita el apoyo de los concejales de IU (2) y del grupo mixto, que integra en solitario el independiente Adolfo Cuéllar.Izquierda Unida hace un balance negativo de los resultados obtenidos en el presente ejercicio, tras haber negociado el año pasado. Según Pizarro, la mayoría de los acuerdos han sido incumplidos y existe "poca predisposición para elaborar de nuevo el presupuesto conjuntamente".

Entre las "falsas promesas", el concejal de IU citó el hecho de que la comisión de seguimiento del presupuesto de 1988 no se haya reunido "ni siquiera una sola vez", así como el incumplimiento de la creación del fondo de cooperación municipal. IU presentará ante la comisión de Hacienda su propia alternativa.

La portavoz de Izquierda Unida, Rosa Bendala, no descartó negociar con los socialistas, "si recomponen sus posturas hacia una mayor transformación social". El primer teniente de alcalde, Francisco Moreno, hizo una "invitación específica" a IU a la negcciación y reiteró su voluntad de llegar a un acuerdo "aunque tengamos que armarnos de paciencia".

[Por otra parte, las diferencias exisentes entre los concejales del Grupo Socialista en el Ayuntamiento de Valencia amenazan ce n retrasar la aprobación del presupuesto municipal para el año 1989, informa Juanjo García del Moral ]