Un palestino judío en la OLP
A. E. Su aspecto de sabio despistado destaca entre los enérgicos militantes de uno y otro grupo palestino que siguen con fruición las discusiones del comité político del CNP. Uri Davis nació en Jerusalén en 1943, .cuando todavía no se había creado el Estado de Israel", en una familia judía. Más adelante, la evolución política del recién nacido país chocó con sus convicciones democráticas y optó por defender éstas hasta el exilio. Era 1984, y su participación en uno de los consejos palestinos le cerró las puertas de regreso a Israel.
"La situación en Israel puede compararse, en algunos aspectos, a la que existía en la Alemania y Austria de los años treinta", asegura insistiendo en los matices que marcan la distancia histórica. "No es que se esté encarcelando a los palestinos por el solo hecho de serlo, pero en el Parlamento hay un grupo político, legalmente reconocido, que defiende la necesidad de la deportación de los palestinos. Eso mismo sucedía en la Alemania nazi con los judíos. Sólo en los años cuarenta cambió la política al respecto".
Davis habla con la convicción del profesor universitario a la vez que con sus movimientos de manos parece querer imprimir un tono entusiasta a su discurso. "Legalmente, los derechos de los palestinos en Gaza y CisJordania son los mismos que los de los judíos bajo la legislación nazi, es decir, ninguno", añade. Su condición de observador en esta 195 sesión del CNP, que desde el pasado sábado se celebra en Argel, le permite el acceso a las discusiones de los comités a puerta cerrada, a los que ni periodistas ni invitados pueden asistir.
Davis, uno de los dos únicos judíos que disfrutan de tal status en . esta reunión, tenía previsto intervenir ante el comité político para proponer un llamamiento a los grupos progresistas de Israel a la vista del triunfo electoral del Likud. El carácter extraordinario de la convocatoria, consagrada exclusivamente a la proclamación del Estado independiente, no lo va a permitir.
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