Monumentos demacrados

La Fundación Villa y Corte muestra su preocupación por la situación en que se hallan la iglesia de San Andrés y la capilla de San Isidro. La recién constituida Coordinadora para la Defensa del Patrimonio Madrileño sale en defensa de la casa de Iván de Vargas. La Asociación de Amigos de los Castillos pide mayor atención al medio centenar de ejemplos de arquitectura militar de la región. Y es que la recuperación del patrimonio presenta carencias monumentales. El Gobierno regional comienza a tomárselo en serio, aunque el dinero disponible siempre es insuficiente.

Dos cosas se han conseguido en los últimos años: el aumento del interés popular por conservar el patrimonio histórico-artístico y una actitud más decidida desde la Administración por recuperar un arco flamígero, una gárgola gótica o un pórtico románico. "Hasta ahora hemos estado un poco a matacaballo", reconoce Javier Gutiérrez, jefe del Servicio de Protección del Patrimonio Inmueble, de la Consejería de Cultura. "Actuábamos siempre con carácter de urgencia, para que no se nos cayeran los monumentos".Ahora se está elaborando por fin un inventario de la riqueza patrimonial de la región. "Una vez que tengamos catalogado todo, podremos acometer estudios patológicos de los edificios más deteriorados y establecer un plan de restauración, un orden de prioridades y necesidades. Podremos también iniciar una política de declaración de monumentos histórico-artísticos", añade Javier Gutiérrez. (Está previsto declarar a Buitrago de Lozoya y Colmenar de Oreja conjuntos histórico-artísticos.) Este año, el presupuesto dedicado por el Gobierno regional para la restauración de monumentos ha sido de 370 millones de pesetas.

La organización Hispania Nostra, creada en 1976 dentro de la internacional Europa Nostra, denuncia casos flagrantes de monumentos en mal estado: la Casa de los Infantes, en El Pardo; los núcleos monumentales de Nuevo Baztán y Buitrago; los jardines del palacio de Boadilla del Monte, y el convento de las Comendadoras, en Madrid.

El Colegio Profesional de Arquitectos de Madrid tiene también su lista: el Oratorio del Caballero de Gracia; el palacio de Linares, en plena plaza de la Cibeles; el edificio colindante con el Banco de España en la calle de Alcalá; la Puerta de Hierro y la Puerta de Toledo, todos en Madrid. Esta institución mantiene

contactos con la Dirección General de Arquitectura para editar una guía de edificios con interés artístico de toda la región.

Castillos

A la Asociación de Amigos de los Castillos no se le escapa el estado preocupante de los castillos de Chinchón, Buitrago y Villarejo de Salvanés, la torre de Arroyomolinos y las murallas de Santorcaz y Talamanca del Jarama. Sabe lo ruinoso de las fortalezas de Barajas, Fuentidueña del Tajo, Perales de Tajuña y Paracuellos del Jarama. "Éstos, como otros monumentos, tienen el problema de que o se les encuentra una utilidad o se les deja morir", comenta la vicepresidenta, Águeda Castellano. "Los castillos catalanes son la envidia de los madrileños. Allí suelen ser propiedades particulares recuperadas con mucho rnimo".

La Coordinadora para la Defensa del Patrimonio Histórico-Artístico, formada por diversas asociaciones vecinales, tiene también su relación de monumentos achacosos en la ciudad de Madrid: la Capilla del Obispo, la casa de Iván de Vargas y el paseo del Prado -consideran que ha sido "prostituido por un mobiliario urbano vulgar"-. La destrucción de tres bloques de edificios para realizar las obras de ampliación del Congreso de los Diputados les ha dolido especialmente.

Como madre de todos esos monumentos a los que, por unas razones u otras, no se les acaba de ver su esplendor se levanta la catedral de la Almudena. Ya hace más de un siglo que se aprobó su proyecto, y no fue precisamente ayer cuando se puso la primera piedra de sus pilares. Fue en 1910. Junto a ella, otros tres edificios han consolidado en la ciudad la disyuntiva de ser arte o chapuza. La iglesia de San Francisco el Grande ha soportado durante seis años un gran andamiaje metálico sin que ello supusiera que se estaban llevando a cabo obras de reforma. La Capilla del Obispo, en la plaza de la Paja, es una joya gótica que el arzobispado de Madrid-Alcalá mantiene escondida. El Oratorio de Caballero de Gracia lo taparon hace doce años y así sigue, por falta de acuerdo en los proyectos de restauración.

La Dirección General del Patrimonio Cultural quiere demostrar que no se queda con los brazos cruzados y también ella hace recuento. La pasada primavera, el Gobierno regional firmó un acuerdo con el arzobispado de Madrid-Alcalá para seguir un criterio unificado de restauración y buscar una utilidad social a los distintos edificios rehabilitados. Por otra parte, el pasado jueves, el Consejo de Gobierno aprobó la creación de comisiones locales para recuperar el patrimonio en los municipios de la región.

El recuento señala las obras realizadas en los tres últimos años en 26 edificios, por valor aproximado de 300 millones. Las principales inversiones han tenido como destinos la iglesia de San Andrés, en Villarejo de Salvanés; el mercado de abastos de Aranjuez y la iglesia de San Pedro, en Camarma de Esteruelas. Otras ayudas han ido a parar a la fachada de la imprenta del Quijote, en Madrid; las murallas de Talamanca del Jarama y Buitrago de Lozoya y los anteproyectos para la restauración del Oratorio del Caballero de Gracia (restauración finalmente adjudicada al arquitecto Feducci).

Ahora mismo están realizándose obras en la capilla de San Isidro (primera fase de un total de tres anualidades por valor de 106 millones) y el convento de las Trinitarias, en Madrid. El próximo año recibirán la visita del albañil el castillo de Barajas (11 millones), la capilla del Ave María (21 millones), el monasterio del Corpus Christi (14 millones) y la iglesia de San Cayetano (19 millones), en Madrid, y la primera fase de la iglesia de San Juan Flautista, en Guadalix de la Sierra (tres anualidades por valor de 96 millones). Se ejecutará, por último, la segunda fase de las obras de la escuela de Minas, posible sede de la Asamblea de Madrid.