Ceaucescu, adversario político de Gorbachov
El presidente de Rumanía, Nicolae Ceaucescu, está practicando ya una política de abierta oposición al máximo, dirigente soviético, Mijail Gorbachov, tanto en lo que se refiere a la aplicación de medidas de liberalización interna como a la cooperación política y económica en la comunidad socialista. Una reunión de expertos en el sureste europeo convocados por el Instituto de Investigación sobre Rumanía y la universidad de Múnich Negó esta semana a la conclusión de que, como señaló el director del instituto, el romano en el exilio Dionisie Ghermani, "Ceaucescu es claramente un adversario político de Gorbachov".
La reunión elaboró una relación de casos de enfrentamientos entre las políticas de Ceaucescu y Gorbachov, entre los que destacan el claro rechazo del presidente rumano al fomento de la iniciativa privada, su política hacia las minorías, radicalmente opuesta a la del Kremlin, y el bloqueo rumano a los intentos soviéticos de intensificar la cohesión económica en el Consejo de Asistencia Económica Mutua (Comecon).Por otra parte, en Viena se produjo la pasada semana un fuerte enfrentamiento entre Rumanía y otros miembros del Pacto de Varsovia.
En una reunión interna en la. Conferencia de Seguridad y Cooperación en Europa (CSCE), la, Unión Soviética, Hungría y Polonia ejercieron una dura presión. sobre Rumanía para que revise su actual posición de rechazo a, numerosos puntos del borrador presentado por los países neutrales y no alineados hace ahora un mes. Rumanía mantuvo su oposición total a aceptar varias propuestas en el terreno de los derechos humanos.
Fuentes del Pacto de Varsovia en la Conferencia de Viena confirmaron que la reunión de los países socialistas de la pasada semana fue virulenta, y expresaron sus dudas sobre la posibilidad de que, finalmente, Rumanía cambie de actitud.
Ya en Madrid, en la apertura de los trabajos de la CSCE, Rumanía intentó desmarcarse de la línea de los demás países socialistas, pero tras varios días de presión soviética renunció a su postura; ahora, sin embargo, dada la tensión existente entre Bucarest y Moscú, las relaciones entre Hungría y Rumanía, que rayan en la hostilidad abierta, y el creciente aislamiento de Rumanía, no se espera esta flexibilidad de Ceaucescu.
No a los derechos humanos
Rumanía se opone a que, como se establece en el borrador de los neutrales y no alineados en la Conferencia sobre Seguridad y Cooperación, cualquier país firmante pueda exigir a otro contactos bilaterales sobre casos específicos de violación de derechos humanos, así como información sobre personas y comunidades; también rechaza que se estipule el "derecho de toda persona a abandonar su país si lo desea", ya que, según la postura oficial rumana, esto podría provocar el éxodo de personas de gran talento y formación costeada por todo el país, en detrimento de la comunidad rumana.
Contra la liberalización
En la organización del Pacto de Varsovia también se refleja la hostilidad de Ceaucescu a la política de liberalización de los demás países socialistas. En las reuniones regulares que celebran los embajadores de los países miembros del pacto militar comunista en las capitales occidentales, cada vez son más habituales las ausencias de los representantes rumanos.
En el seno de la comunidad socialista se sigue con especial preocupación el aumento de la tensión entre Rumanía y Hungría, que está alcanzando una nueva cota con la publicación del programa de Ceaucescu para erradicar las comunidades rurales y concentrar a la población en ciudades agrarias de nuevo tipo.
Este proyecto, que supondrá la demolición de 8.000 pueblos de aquí al año 2000, haría desaparecer por completo la cultura de las minorías húngara y alemana en Rumanía; afectaría, no obstante, asimismo, a la población rumana. Los intentos de la Unión Soviética de mediar positivamente en el conflicto entre Budapest y Bucarest han fracasado hasta ahora y han demostrado que la influencia de Gorbachov sobre Ceaucescu es, actualmente, nula.
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