El Gobierno de Colombia culpa al M-19 del secuestro de Gómez Hurtado

El Movimiento 19 de Abril (M-19) es el autor del secuestro del ex candidato socialconservador a la presidencia Álvaro Gómez Hurtado, retenido tras un sangriento tiroteo del pasado 29 de mayo, según afirmó ayer el Gobierno. Un breve comunicado difundido por la presidencia de la República asegura que, "existen indicios graves que permiten afirmar que el secuestro fue realizado por el grupo subversivo M-19". Hasta ayer, este movimiento guerrillero no había reivindicado el hecho.A su vez, la familia del secuestrado emitió anoche un comunicado en el que afirma que Gómez Hurtado se encuentra en poder de un grupo denominado Colombianos por la Salvación Nacíonal, que exige un "repudio nacional a las detenciones arbitrarias, a la tortura y a los secuestros de líderes políticos y sindicales".

Estas exigencias coinciden con las formuladas por un grupo de 80 personas, entre ellas 20 niños, que ocuparon ayer pacíficamente la sede, en Bogotá, de la Comisión Episcopal Latinoamericana (CELAM), y pidieron al hijo del secuestrado que se personas en ese edificio.

El M-19 es el mismo grupo que en 1980 tornó una embajada en Bogotá, manteniendo como rehenes durante más de 60 días a 12 embajadores; y el mismo que el 6 de noviembre de 1985 asaltó el Palacio de Justicia, que se saldó con la muerte de 95 personas, entre ellas 12 magistrados de la Corte, tras el asalto del Ejército y el incendio del edificio.

Este grupo guerrillero nació en 1974, con la consigna "Por el pueblo, con las armas, al poder". Una de sus primeras acciones armadas fue el robo de la espada del libertador Simón Bolívar. A través de golpes espectaculares, el M-19 se convirtió en el grupo guerrillero más popular del país.

Fueron ellos los primeros en hablar de diálogo. Por ello, aceptaron el llamamiento a la paz formulado por el Gobierno de Belisario Betancur. Finalmente afirmaron que el Gobierno de Betancur los había traicionado. Estos cuatro años de tregua acabaron con el M-19 y con sus máximos dirigentes, que murieron uno a uno. En este momento se le considera uno de los grupos guerrilleros más débiles.