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EL VOLCÁN CENTROAMERICANO

España y Costa Rica solicitan al arzobispo de Panamá que medie para propiciar la salida de Noriega

ENVIADO ESPECIALLos jefeS de Gobierno de España y Costa Rica, Felipe González y Oscar Arias, respectivamente, informaron ayer de que han acordado solicitar al arzobispo de Panamá Marcos McGraft, que sea el mediador en los intentos para propiciar la salida del general Manuel Antonio Noriega- Tanto Arias como González parece que se mostraron convencidos de que el abanono de Panamá por Noriega es una solución necesaria aunque no suficiente, para la pacificación de aquel país centroamericano. El ex presidente de Venezuela Carlos Andrés Pérez, en una conversación telefónica que ayer manyuvo desde San José con Noriega, le informó de este acuerdo unánimemente adoptado en la reunión mantenida entos dos últimos días por Pérez, González, Arias y el expresidente de Costa Rica Daniel Oduber.

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De acuerdo con fuentes diplomáticas españolas y costarricenses la sensación existente es de optimismo respecto a las posibilidades de que Noriega acepte. la mediación de McGraft, primero -pese a la escasa simpatía que el general siente hacia el arzobispo-, y su propio abandono del país, después. Arias y Felipe González, en la conferencia de prensa conjunta que marcó el fin de la visita "de trabajo" del presidente del Gobierno español a Costa Rica, rehusaron confirmar el contacto telefónico de Pérez con Noriega, si bien tampoco lo desmintieron: "para que una me diación sea serie y eficaz sólo se pueden divulgar algunas cosas", dijo González.Arias, Pérez, Oduber y González permanecieron todo el domingo añana del lunes reunidos en un complejo turístico de Playa Carrillo, a 350 kilómetros de San José, elaborando una propuesta de mediación "de buena fe" para lograr una solución a la crisis panameña, cuyo deterioro es rápido y creciente. Finalmente, los cuatro políticos, miembros de la Internacional Socialista (IS) decidieron otorgar a la Iglesia católica el protagonismo en la mediación, entendiendo, como dijo González, que la IS "no es el mediador adecuado". Al tiempo que hacían saber, dentro de unos límites de gran cautela, su rechazo por las "maniobras económicas" norteamericanas, "que producen un deterioro no reversible a corto plazo en Panamá". El Nuncio apostólico en Panamá, el español inonseñor Laboa, ya ejercíaciertas funciones mediadoras por deseo de las partes en conflicto. A la hora de cerrar esta edicióntarlos Andrés Pérez no había contactado aún con monseñor McGraft, dado que regresó precipitadamente a Caracas desde Playa Carrillo , tras haber contactado con Noriega.

González y Arias, que demoraron más de tres horas su regreso a la capital costarricense, retrasando hasta las 14.30 (hora local, 22.30 hora peninsular española) la vuelta a Madrid del presidente del Gobierno, se mostraron públicamente menos optimistas que el domingo respecto a la inmediatez de una solución para Panamá.

Un paso adelante importante.

Sin embargo, fuentes diplomáticas de ambos países dijeron que la reunión de Playa Carrillo había supuesto "un paso adelante iniportante" en el logro de esa solución y recordaron el papel que Pérez, Oduber y el ex presidente colombiano Alfonso López Michelsen -ausente por enfermedad- jugaron en 1979 en la solución de la crisis nicaragüense, propiciando la salida de Soinoza.

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Las posibilidades de éxito del acuerdo de Sapoá, entre el Gobierno y la guerrilla nicaragüenses, fue el otro gran tema tratado en las conversaciones mantenidas por Felipe González y óscar Arias. Ambos se mostraron ayer mucho más comedidos que en anteriores encuentros con la Prensa a la hora de enjuiciar el papel norteamericano. González propuso que, lo mismo que Washington propicia "iniciativas articuladas" para la paz en Oriente Medio, haga algo semejante en Centroamérica. "tarde o temprano habrá iniciativas de esa naturaleza por parte arnericana", dijo.

La propuesta de Arias de celebrar una cumbre de jefes de Estado centroamericanos no ha pasado aún de ser una iniciativa apoyada por Arias y el presidente guatemalteco, Vinicio Cerezo, y parece poco probable que pueda realizarse antes de que, el próximo 16 de abril, el presidente de Honduras, José Azcona, viaje a Madrid en visita oficial.

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