En libertad un guardia civil acusado de tolerar juego clandestino
La Audiencia de Barcelona ha absuelto al sargento de la Guardia Civil Samuel Carrillo Céspedes de un delito de cohecho, acusación que mantenía el fiscal por considerar que desde 1975 a 1980 aceptaba dinero a cambio de no intervenir en los locales donde existía juego clandestino.
Otros siete acusados del mismo delito han sido absueltos. María Asunción García Barba ha sido la única condenada a un año de prisión por proponer a otro guardia civil un acuerdo económico para poder celebrar partidas.
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