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Crítica:
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

Herencias compartidas

.Terry Jones, director de Servicios muy personales, fue uno de los principales creadores del colectivo cómico británico Monty Python. El grupo cómico creado en 1969 estaba formado por Graham Chapman, John Cleese, Eric Idle, Michael Palin, Terry Gilliam -el único americano del grupo- y por Terry Jones. La formación, con sus personales sketches, revolucionó en la pasada década la televisión británica, medio del que pasarían al cine. Aunque su labor era colectiva, las realizaciones estaban a cargo de Terry Jones y Terry Gilliam.

Un sentido sainetesco, el mal gusto, los gags desproporcionados, la irreverencia, el absurdo, eran los ingredientes más visibles de su humor corrosivo, y aveces de brocha gorda, pero de acertada comercialidad. Gilliam 31 Jones codirigieron Los caballeros de la tabla cuadrada. Y Jones, en solitario, La vida de Brian y El sentido de la vida, con más ambición que los anteriores títulos, pero volviendo a la mecánica de los sketches.

Servicios muy personales

Director, Terry Jones; guión, David Leland; fotografia, Roger Deankins; música, John Duprez; productor, Tim Bevan. Intérpretes: Jube Walters, Alec McCowen, Danny Schiller, ShirleyStelfox, Victoria Hardcastle, Tim Woodward, David Atkins, Leon Lissek. Reino Unido, 1987. Salas de estreno en Madrid: Proyecciones, Dúplex 1 (versión original).

El sexo británico

Ahora, y fuera del colectivo, emprende en solitario su carrera con más independencia, tornando como argumento el sexo en la sociedad británica.Servicios muy personales está basada en la vida de Cynthia Pine, propietaria de un burdel que sufrió por ello seis meses de arresto, y que siete años después, 1987, fue acusada del mismo delito y posteriormente absuelta.

Entre la denuncia y la hipocresía y convencionalismo de la tradicional sociedad británica, con una estética feísta en ocasiones, y entre la reiteración y el dinamismo, la historia, llena de personajes, va alternando lo cómico con lo sociológico, sin poder zafarse de los postulados de Monty Python, ni del retrato que denunciaba el free cinema.

Entre la emotividad y la risa, con apuntes de denuncia social, Servicios muy personales navega sin rumbo fijo, y da la sensación de ser una reflexión previa de Terry Jones antes de elegir su camino propio y diferenciado en el cine británico.

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