Presuntas irregularidades en la gestión contable de la universidad Autónoma de Madrid entre 1982 y 1984

El Tribunal de Cuentas ha remitido al Congreso una fiscalización realizada a la universidad Autónoma de Madrid (UAM), relativa al período 1982-1984, de la que se desprende que durante esos años la universidad obtuvo ingresos por importe de, al menos, 257.283.349 de pesetas que no fueron incluidos en las cuentas oficiales, informa Europa Press. Cayetano López, rector de la UAM desde junio de 1985, manifestó ayer a este periódico que está "preocupado, por lo que pueda afectar a la buena imagen de la UAM la presunción de irregularidades administrativas, probablemente inevitables entonces y, desde luego, hoy corregidas".

En el citado informe, el Tribunal de Cuentas señala que ha dado traslado del mismo a la Fiscalía del propio tribunal y al Servicio Jurídico del Estado, "por si de los hechos puestos de manifiesto en él, en particular los incluídos en las conclusiones, pudiera deducirse la existencia de responsabilidades contables".En la UAM, según el tribunal, durante el período fiscalizado se han sustraído al preceptivo régimen de contabilidad pública y, "por consiguiente, a la rendición de cuentas a este tribunal, operaciones económicas que en su vertiente del gasto ascienden al menos a 257 millones de pesetas mediante la práctica de atender pagos con ingresos no reflejados en cuentas (cajas b)".

"Dentro de este importe, 253 millones de pesetas correspondían de iure a operaciones de naturaleza presupuestaria y, por tanto, su pago al margen de los créditos autorizados y de los procedimientos preceptivos de ordenación e intervención vulneran la ley General Presupuestaria", añade el tribunal. ste subraya a continuación que el 60%, aproximadamente, de los pagos señalados corresponden a remuneraciones a personal por distintos conceptos, "no habiendo sido sometidas a la preceptiva. retención por IRPF, ni computadas en la mayoría de los casos en las bases de cotización a la Seguridad Social".

El tribunal señala que durante el período sornetido a fiscalización, la Universidad Autónoma de Madrid ha utilizado 50 cuentas corrientes o de ahorro, abiertas en la banca privada, de las que solamente sobre cinco existe constancia de que hayan sido autorizadas por el Ministerio de Economía y Hacienda. "Por otra parte", añade el informe, "de estas 50 cuentas, 46 no están intervenidas por la Intervención Delegada, sin que, en muchos casos, tal hecho esté justificado por la naturaleza de las cuentas o de las operaciones que se realizan a través de ellas".

Cayetano López, actual rector de la UAM, manifestó que el periodo analizado por la auditoría corresponde a una etapa anterior a la ley de Reforma Universitaria, que ha venido a lar un marco de flexibilidad contable mucho mayor a las universidades, precisamente para evitar este tipo de irregularidades, "Iamentablemente inevitables en muchas ocasiones, si no se quería perjudicar gravemente el funcionamiento de servicios vitales de la universidad".

Prácticas inevitables

Para Cayetano López, los rectores que sucesivamente han ido responsabilizándose de la gestión de la UAM no han tenido muchas veces otro remedio que asumir unas prácticas administratrivas irregulares, preexistentes en cada caso a sus propios mandatos, sobre todo al tener que aceptar las justificaciones de gastos fuera de las normas presupuestarias anteriores, excesivamente rígidas."Consecuentemente", añadió el rector, "no sólo no tendría sentido hablar de prácticas de mala fe en ningún caso, sino que, en cierto modo, hay que valorar la responsabilidad que asumieron al mantener este estatu quo, para no dañar gravemente así a la universidad, e intentar modificarlo en el sentido de regularizar la gestión en la medida de sus posibilidades. Afortunadamente hoy todas estas prácticas administrativas han podido ser corregidas, tal y como se informó en su momento al Tribunal de Cuentas" *

El rector de la UAM dijo que, pese a tratarse de un periodo de gestión anterior al mandato de la actual junta de gobierno, ésta ha tenido lógicamente que presentar las correspondientes alegaciones a los auditores. "Pedimos expresamente en su momento", concluyo el rector, "que dichas alegaciones se incorporasen al informe final que pudiera remitirse, en su día, al Congreso".

El Tribunal de Cuentas indica, en sus conclusiones, que procede poner en conocimiento de los ministerios de Economía y Hacienda y de Trabajo y Seguridad Social las irregularidades advertidas en cuanto a la falta de sometimiento a la retención del IRPF y de cotizaciones a la Seguridad Social.