Argentina y Brasil invitan a Uruguay a que se integre en su futuro mercado común

Los presidentes de Argentina, Raúl Alfonsín; de Uruguay, Julio María Sanguinetti y de Brasil, José Sarney, reunidos durante siete horas en la ciudad uruguaya de Colonia el pasado sábado, coincidieron en el análisis de la situación política de sus países" y de los problemas de la región y del mundo", según explica el comunicado oficial que se entregó a los periodistas. En la reunión, Uruguay fue invitado formalmente a Integrarse a un futuro mercado común argentino-brasileño.

La formal y breve conferencia de prensa posterior sólo sirvió para confirmar que los dos países promotores y líderes de la integración en el área -Brasil y Argentina- decidieron incorporar a Uruguay como miembro de pleno derecho en los acuerdos económicos. Cuando, en marzo próximo, Alfonsín viaje a Brasil para inaugurar, junto con Sarney, una planta industrial dedicada a enriquecer uranio, Sanguinetti será invitado a firmar el protocolo que incluye a Uruguay en los futuros proyectos conjuntos.Fuera de la escena central, los cancilleres de los tres países -Dante Caputo, de Argentina; Enrique Iglesias, de Uruguay, y Abreu Sodre, de Brasil-, siguiendo las instrucciones de sus jefes, alcanzaron objetivos más concretos: 1) Los tres países se opondrán en la Comisión de Derechos Humanos de las Nacíones Unidas a la condena directa de Cuba que propone EE UU, por la supuesta violación de los derechos humanos en ese país, si no se conoce antes el informe de una conúsión que investigue las denuncias. 2) Impulsarán una reunión urgente de los cancilleres del llamado Grupo de los Ocho Países Latinoamericanos para iniciar una ronda de negociaciones con representantes de la Comunidad Europea. Ese informal club de deudores desea revisar las condiciones de pago y el intercambio económico. 3) Brasil y Argentina apoyarán la candidatura del ministro de Exteriores uruguayo, Enrique Iglesias, que aspira a ocupar la presidencia del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

El presidente argentino, Raúl Alfonsín, informó a sus homólogos de Brasil y Uruguay sobre el reciente intento de golpe de Estado protagonizado por el teniente coronel Aldo Rico. Un día antes, en Buenos Aires, se difundía el comunicado oficial de la jefatura de Estado Mayor del Ejército de Tierra en el que se anunciaba la baja de Aldo Rico y de su segundo, el teniente coronel González Naya. Ambos serán procesados por la justicia militar y el consejo de guerra está facultado para ordenar la prisión perpetua a ¡os promotores de la sublevación.