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La televisión francesa, presenta pruebas de la venta masiva de armas europeas a Teherán

Lluís Bassets

LLUÍS BASSETS Numerosos países europeos se hallan implicados en el tráfico ilegal de armamento y municiones hacia Irán, según las pruebas presentadas por periodistas franceses y belgas en un reportaje titulado Eurogate y difundido ayer por la TF-1, la principal cadena de televisión francesa.

Los fabricantes de pólvora vienen funcionando como un auténtico cártel, que establece los precios y reparte los mercados, desde hace casi 110 años, pero ha sido en los últimos años, con la guerra Irán-Irak, cuando se han afinado los métodos de tráfico ilegal y se ha puesto en marcha un grupo de empresas europeas destinado a abastecer esta guerra de desgaste, conocido como el consorcio.La Empresa Nacional Santa Bárbara es una de las industrias directamente citadas en el reportaje como participante en este tráfico ilegal.

El autor del reportaje, Pierre Abramovici, ha contado con la colaboración del principal especialista en el tráfico hacia Irán, el periodista belga Walter de Bock, autor del libro Armas para Irán, que será publicado por el editor parisiense Gallimard a principios de febrero.

De Bock asegura poseer pruebas sobre la implicación de varias empresas españolas, algunas de ellas de propiedad pública, en el tráfico de armamento. La participación española en las actividades del consorcio se localiza principalmente entre 1986 y 1987, en el momento en que sus actividades ilegales han sido localizadas y paralizadas en otros países, como Italia, Bélgica y Francia. España ha actuado como lugar de paso de material bélico pero también como país suministrador, según el reportaje.

Denuncia contra la SNPE

En el informe difundido ayer se documenta abundantemente la participación de la SNPE (Sociedad Nacional de Pólvoras y Explosivos), propiedad del Estado francés, que ha venido asumiendo prácticamente la secretaría del consorcio.

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Antes de las elecciones legislativas de 1986, el consorcio cesó en sus actividades en Francia, en buena intuición de una victoria conservadora que llevaría a denunciar un tráfico ilegal por parte de los socialistas, pero los últimos pedidos fueron "honorados" Hasta el mes de agosto de 1986, ya con Jacques Chirac como primer ministro.

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Sobre la firma

Lluís Bassets
Escribe en EL PAÍS columnas y análisis sobre política, especialmente internacional. Ha escrito, entre otros, ‘El año de la Revolución' (Taurus), sobre las revueltas árabes, ‘La gran vergüenza. Ascenso y caída del mito de Jordi Pujol’ (Península) y un dietario pandémico y confinado con el título de ‘Les ciutats interiors’ (Galaxia Gutemberg).

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