29 palestinos muertos al cumplirse un mes de protestas y represión en Gaza y Cisjordania
Soldados israelíes mataron ayer a un manifestante palestino e hirieron al menos a otros cuatro en el curso de violentos disturbios en Gaza, según fuentes oficiales de Israel, coincidiendo con la llegada de un emisario de la ONU a la zona. Con ello son ya 29 los muertos en los territorios ocupados desde el comienzo de la ola de protestas, el pasado 9 de diciembre. El Ejército israelí impidió el acceso a la Prensa en la zona de Gaza a la que fueron enviadas las tanquetas. Las autoridades militares israelíes tuvieron que pedir prestada a la ONU una ambulancia para evacuar a los hospitales a los numerosos heridos.
Bassam Jader Salem, 17 años, se convirtió ayer en el muerto número 29 durante el mes de disturbios, al recibir varios impactos de bala durante la represión de una violenta protesta desarrollada en un campo de refugiados palestinos de Jan Yunis, en el sur de la franja de Gaza ocupada por Israel. Otros cuatro palestinos resultaron heridos en el mismo lugar por los disparos que los soldados efectuaron tras haber intentado, inútilmente, dispersar a la multitud con el lanzamiento de gases lacrimógenos y balas de goma.Según declararon asistentes sanitarios extranjeros, el número de heridos ayer en los territorios de Gaza y Cisjordania asciende a 13 personas y no cuatro, como afirman fuentes oficiales israelíes. En Gaza, donde el proiraní movimiento Jihad Islámica había convocado una huelga para la jornada de ayer, se registraron incidentes en numerosos puntos, especialmente en Rafiah y Deir el Balah, además de Jan Yunis y Berej. El ejército pidió a la ONU que le prestara una ambulancia para evacuar los heridos al hospital.
Las autoridades israelíes impidieron el acceso de la Prensa a la franja de Gaza que ha sido declarada zona militar prohibida adonde fueron desplazados centenares de efectivos militares.
Mentís israelí
Un portavoz del ejército israelí desmintió ayer las informaciones según las cuales Tel Aviv envió tanques a cinco campamentos de refugiados palestinos en Gaza, informa en Tel Aviv.
Según informó un periodista palestino, cuatro tanques israelíes tomaron ayer posiciones en el campo de refugiados de Berej donde un palestino resultó gravemente herido en la cabeza y otros seis recibieron heridas leves durante los enfrentamientos. Fuentes palestinas dieron en cierto modo la razón al portavoz militar al rectificar las anteriores informaciones y aclarar que no se trataba de tanques sino de tanquetas. Dada su similitud la población denomina tanques a estos vehículos blindados. Esta información no fue desmentida por Tel Aviv.
Ayer se impuso además el toque de queda en los campos de refugiados de Nuseirat y Jan Yunis así como al de Bureij, que se halla cerrado desde que las tropas mataron a tiros a un manifestante el pasado viernes. También fue establecido un toque de queda en los campos de Ballata, Farah y Al Amhari, en Cisjordania.
Estos incidentes coinciden con la visita a la zona del emisario de la ONU, el secretario general adjunto para asuntos de Oriente Próximo, Marrack Goulding, a quien el primer ministro israelí, Isaac Shamir, se negó a recibir el pasado viernes, a su llegada al aeropuerto de Tel Aviv.
El mismo día Shamir anunció, ante un grupo de senadores estadounidenses de visita en Israel, que su Gobierno está dispuesto a reanudar las negociaciones para la concesión de un estatuto de autonomía para los palestinos de Gaza y Cisjordania "en cuanto se restablezca la calma".
El Consejo Central de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), que terminó ayer una reunión de dos días en Bagdad, rechazó la propuesta y reiteró su exigencia de que termine la ocupación israelí. "Tras el fracaso israelí para terminar con el levantamiento popular palestino, Shamir prueba fortuna con un soborno barato", manifestó un portavoz de dicha organización.
El Consejo Central de la OLP pidió además que se organice una acción de "protección urgente internacional" para la población palestina y decidió la creación de un comité especial encabezado por el presidente del Consejo, Cheij Abdel Hamid Al Saeh, encargado de estudiar la situación en los territorios ocupados.
Por otra parte, el periodista palestino Hanna Siniora que esta semana convocó a un boicoteo económico contra Israel en los territorios árabes ocupados, fue interrogado ayer por la policía de Jerusalén. Esta medida fue exigida por el asesor jurídico del Gobierno israelí, Jose Harish, por considerar que su llamamiento puede ser considerado una instigación a la rebelión, según informó la radio oficial en Jerusalén.
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