La mujer envenenada con una torta en Almería se encuentra en estado crítico

Felisa García, de 52 años, la madre abuela intoxicada por una torta de chicharrones que contenía un insecticida, se encuentra en estado crítico en el hospital de Torrecárdenas de Almería.Tanto Felisa como Pío Rodríguez, de 33 años, que también permanece en la unidad de cuidados intensivos precisan de ventilación mecánica. En la planta de nefrología continuaban en la tarde de ayer Andrés Pérez, de 50 años, y su hijo Juan Jesús Pérez, de 20 años que posiblemente hoy sea dado de alta.

Técnicos de la Consejería de Salud de Almería y Sevilla junto con los análisis llevados a cabo por la cátedra de medicina legal de la universidad de Granada, han llegado a la conclusión que la intoxicación de los doce miembros de la familia, ocurrida el pasado lunes, día 28 de diciembre, se debió a un producto insecticida.

Se trata de un clorado policíclico denominado endrim que por error fue confundido con un paquete de azúcar que se supone debería de contener la torta de chicharrones preparada por Felisa García.

El hecho de que esta mujer sea la más gravemente afectada se debe, según una apreciación médica, a que seguramente estuvo probando desde un principie los sabores de la torta con el insecticida, de los utilizados para las plagas del campo.

Los miembros de la familia guardan un extraño hermetismo sobre las causas de la intoxicación. Se limitan a recordar que sólo les preocupa la recuperación de los enfermos. El matrimonio formado por Felisa García, de 52 años, y Andrés Pérez, de 50, tiene tres hijos y una hija. Son propietarios de un cortijo situado entre las barriadas de Jaire y Cabo de Gata, a unos 30 kilómetros de Almería.

La familia desarrolla actividades agrícolas y ganaderas. Cultivan tomates y sandías y cuentan con ganado ovino.