El primado de la Iglesia de Inglaterra se solidariza con la condena al clero homosexual

El arzobispo de Canterbury y primado de la Iglesia de Inglaterra, Robert Runcie, se ha solidarizado con la condena del clero homosexual que acaba de realizar el obispo de Ripon, David Young. Otros 14 miembros del episcopado anglicano han aprobado la decisión de Young de impedir que los homosexuales sean ordenados sacerdotes. El Movimiento Cristiano de Lesbianas y Gay (LGCM) ha señalado que está horrorizado por la decisión de Young.

La Iglesia de Inglaterra cierra este difícil año para ella sacudida por un conflicto que pensaba haber acotado durante la reunión celebrada el mes de noviembre por el Sínodo General, especie de Parlamento que orienta la actuación eclesial.El obispo de Ripon ha anunciado a sus diocesanos de Yorkshire que "aquellos que sean conocidos por su práctica homosexual no podrán estudiar en esta diócesis ni serán ordenados" y que "aquellos que ya han sido ordenados y están implicados en actividades homosexuales no tendrán puestos" en la misma diócesis.En el pasado sínodo, la situación del clero homosexual (más de un tercio del total, según el LGCM) provocó intensos debates, y al final se rechazó una moción de condena de tales miembros y actividades para aprobar otra resolución de compromiso que simplemente consideraba la práctica homosexual como no correspondiente al ideal de amor cristiano.Más de una docena de obispos se han solidarizado ahora con Young y han hablado a favor de una postura de firmeza contra la que ven como una excesiva laxitud moral dañina para la Iglesia. La presencia de Runcie en este grupo ha sorprendido desagradablemente al clero homosexual, que en el día que ha mediado entre las manifestaciones de Young y la declaración del arzobispo de Canterbury se había "amparado en la más tolerante actitud" de éste para criticar a aquél. Runcie no se ha pronunciado directamente, sino que ha hecho público un comunicado en el que dice que "comparte los puntos de vista del obispo de Ripon en esta materia" Young distingue entre la orientación homosexual de la persona y la práctica homosexual que hará posible que los integrantes del primer grupo no sean represaliados. A los clérigos homosexuales de la diócesis de Yorkshire se les "aplicará la disciplina apropiada".