7 personas muertas y graves inundaciones en Alzira y Orihuela

El intenso temporal de lluvias que asola desde el martes el sur del País Valenciano y el norte de la región de Murcia ha causado el desbordamiento de los ríos Júcar y Segura y la muerte de siete personas. La ciudad de Alzira (Valencia) registró ayer una inundación de dimensiones similares a la que vivió en 1982, tras la rotura de la presa de Tous, con más de dos metros de agua en muchas de sus calles. En Orihuela (Alicante), donde muchos vecinos fueron rescatados de los tejados de sus casas, se vivieron escenas dramáticas, y se esperaba un desbordamiento aún mayor del Segura para las tres de la madrugada de hoy.

Mientras las ciudades de Gandía y Oliva y la comarca valenciana de La Safor, que vivieron el martes las inundaciones más graves, iniciaban el recuento de daños y trataban de normalizar lentamente la situación, la ciudad de Alzira y la mayor parte de la comarca de La Ribera vivían escenas de un dramatismo similar al que se generó en 1982, tras la rotura de la presa de Tous. Comerciantes, industriales, agricultores y ciudadanos que aún no han cobrado las indemnizaciones correspondientes a aquella catástrofe, vieron anegados de nuevo sus establecimientos y viviendas.Sin el peligro de rotura del pantano situado aguas arriba del Júcar -la presa no ha sido reconstruida- nadie esperaba una inundación de la envergadura de la de 1982. Aunque con una menor virulencia que entonces, el nivel de las aguas en Alzira, alcanzó, sin embargo, los dos metros de altura.

En Carcaixent, más de un 70% de la población resultó anegada. También sufrieron inundaciones localidades como Algemesí, Riola, Fortaleny, Albalat, Sollana y Beáeixida, que resultó totalmente destruida en 1982 y tuvo que ser evacuada de nuevo en la noche del pasado miércoles.

Efectivos del Ejército y de Protección Civil encontraron dificultades para acceder a Alzira, en cuyo hospital se concentraron los servicios de acogida y asistencia, así como a pueblos de La Ribera desde el centro instalado en L'Alcúdia.A los cuatro muertos -dos hombres y dos mujeres- contabilizados el miércoles en Gandía y Oliva, en la provincia de Valencia, y Villajoyosa y La Santa Faz, en Alicante, se añadió ayer el fallecimiento a causa de las inundaciones de otras tres mujeres, en Godelleta (Valencia), Orihuela (Alicante) y Pilar de la Horadada (Alicante). La mujer muerta en Godelleta es Consuelo Folgado, de 31 años, y la víctima hallada en la pedanía de Hurchillo, en Orihuela, es Carmen García González. La víctima de Pilar de la Horadada no ha sido identificada.

Situación crítica

La comarca de la Vega Baja vive una situación crítica desde que, en la noche del miércoles se desbordó el río Segura, informa Joaquim Genís. Los problemas pueden acrecentarse en la madrugada de hoy, con la llegada prevista de una avenida provocada por la crecida de diversos afluentes del Segura tras las lluvias registradas en sus cuencas. Más de 1.500 personas tuvieron que ser evacuadas en distintos pueblos de esta comarca.En la zona del barrio de Mariano Casas, entre Orihuela y Arneva, la más castigada por el desbordamiento, fueron evacuadas desde helicópteros más de un centenar de personas aisladas en los tejados de sus casas. También cerca de Orihuela, soldados de las COE trataban anoche de salvar a cinco niños que permanecían aislados en una acequia.La Vega Baja, donde viven alrededor de 150.000 personas, se encuentra incomunicada y la principal preocupación existente en la zona se centra en el término municipal de Orihuela, que se está inundado en el 80% de su superficie. La ciudad de Alicante, por otra parte, recupera lentamente la normalidad tras las intensas lluvias de días pasados.

La ciudad de Elche, en la comarca alicantina del Baix Vinalopó, se encontraba aislada por carretera y dos edificios ubicados en el centro urbano se derrumbaron a causa de las lluvias. Fuentes municipales citadas por la agencia Efe cifraban en 2.000 millones de pesetas los daños ocasionados en la agricultura y la industria de la zona.

Lanchas de la Cruz Roja rescataron en la vecina localidad de Crevillente a cerca de 200 personas y las autoridades se disponían a evacuar a un millar de vecinos del pueblo de Dolores. En Denia y otras poblaciones de la comarca alicantina de La Marina Alta como Jávea y Gata de Gorgos, que ayer permanecían incomunicadas, los daños eran cuantiosos.

La mayoría de las carreteras de las zonas afectadas se encontraban cortadas y resultaba imposible la comunicación entre Alicante y Valencia. En la autopista A-7 funcionaba un único carril, debido a los derrumbamientos sufridos por la calzada en algunos tramos. Persistían en la mayor parte de la zona los cortes de suministro eléctrico, de teléfono y del servicio de agua potable.El presidente de la Generalitat valenciana, Joan Lerma, que ayer visitó las zonas afectadas por las inundaciones, anunció en Gandía que el gobierno autónomo, en una reunión extraordinaria que celebrará hoy, pedirá la declaración de zona catastrófica para las comarcas inundadas. La Consejería de Agricultura y Pesca de la Generalitat manifestó la imposibilidad de ofrecer valoraciones de daños dadas las dificultades de acceso a las partidas más afectadas. Este departamento avanzó, sin embargo, que los daños serán importantes en infraestructuras agrarias, por el desmoronamiento de márgenes y la destrucción de caminos y canales de riego.

Nuevas poblaciones se vieron afectadas por las inundaciones en Murcia, al llegar el agua a las localidades costeras a través de las ramblas, informa Paloma Reverte. En San Javier, San Pedro del Pinatar, Beniel y Alquerías, helicópteros, lanchas y camiones rescataron grupos de personas que habían quedado incomunicadas. Sólo en daños agrarios, esta riada superará los sufridos en julio de 1986, fecha en que se alcanzaron los 4.785 millones de pérdidas, según la Consejería de Agricultura. La Armada y el Ejército, junto con los efectivos de Protección Civil y voluntarios, trabajaron todo el día en las tareas de rescate.

El presidente de la comunidad autónoma de Murcia, Carlos Collado, que se encuentra de viaje en Miami, anunció ayer su intención de adelantar el viaje de vuelta que, según fuentes del gobierno regional, se producirá hoy.