El maestro Thomas
Algún día saldrá a la luz el papel de enlace cumplido por David Thomas ante las nuevas generaciones de músicos. Su casa fue una suerte de wellingtonia para los jóvenes jazzmen madrileños y no es casual que para su última formación haya convocado a músicos de las diversas vanguardias capitalinas. En Magic Music están el trompetista Alfredo Cardá (Orgón), el plurisaxofonista Pelayo Arrizabalaga (Crónicos), el guitarrista José Luis Silvestre (ISP) y el batería José Vázquez (OCQ). Dirige Thomas desde su contrabajo y su pulsación hace mover a toda la banda. Y al público.En estas noches el cambio de repertorio ha sido constante y parece evidente que el grupo tiene mucha música que ofrecer. No es difícil ver en ellos una nueva cota a la que accede el jazz local. Junto a lúcidos homenajes a Coltrane -Spiritual, Naima, Miles'moon-, originales del líder y de Arrizabalaga, con arreglos de Cardá. Thomas presenta temas que encuentran inspiración en el conjunto de la historia del jazz, del rag al funk, y en todo ello hay una precisa definición: es, efectivamente, la música de David Thomas.
David Thomas Magic Music
Café Central. Madrid. Hasta el 4 de octubre.
Las voces de los solistas se alzan sobre una rítmica que resulta ejemplar en la escena local. José Vázquez sabe seguir el tirón de Thomas y José Luis Silvestre no sólo demuestra sus capacidades de solista arrollador, sino que también resulta modélico en su trabajo bajo los solos, en la interacción con Arrizabalaga y Cardá. El resultado global es verdaderamente brillante y quizá sea en la aproximación a territorios hispanos donde quede más trabajo por hacer. No parece que la voz de Antonio Carbonell, tan joven y tan flamenco, haya encontrado hasta el momento ubicación concreta en el sonido de la banda.