Inspección de las compras de pisos caros

Xabier Olaberri cree poder afirmar que los precios de los pisos en San Sebastián bajarán en los próximos años. "Ésta es una batalla sobre todo psicológica, como psicológica es la sensación de escasez que ha impulsado el fenómeno especulativo. De lo que se trata es de pinchar el globo, de convencer a los especuladores de que pueden pillarse los dedos y de demostrarles que todo dinero que venga a San Sebastián va a ser rigurosamente investigado".

Olaberri, uno de los políticos vascos más incisivos, considera que el hecho de que los precios hayan sido frenados sólo con la actitud mostrada por la nueva corporación -de Gobierno Eusko Alkartasuna- Euskadiko Ezkerra- confirma lo ficticio de la escalada especulativa. "Iturzaeta", dice el concejal, "se equivocó, dijo que los pisos de San Sebastián seguirían subiendo en los tres años siguientes, y es muy posible que vuelvan a equivocarse quienes anuncian ahora que éste es un frenado momentáneo".

El plan de actuación de la concejalía de Urbanismo contempla la inspección fiscal del dinero que se invierta en la compra de los pisos caros. "El que paga 30 o 40 millones de pesetas", afirma, "lo hace muy probablemente para especular, y se va encontrar una inspección fiscal muy seria, con secretario y todo".

Olaberri confía además en que la oferta de 400 viviendas en el polígono de Intxaurrondo empiece a paliar el desequilibrio entre oferta y demanda. En su opinión, ésa y otras zonas de la ciudad pueden albergar urbanizaciones de calidad y ofrecer como contrapartida a los edificios del centro un entorno natural más atractivo. El fomento de las viviendas de alquiler constituye otro de los puntos de intervención.

El concejal de EE estudia la posibilidad de gravar con una tasa a los propietarios de los 12.000 pisos vacíos de la ciudad, y se propone aplicar en San Sebastián un proyecto elaborado por el Gobierno Vasco que contempla la construcción de viviendas de 67 metros cuadrados cedidas en régimen de alquiler a muy bajo precio.

Dos terceras partes del alquiler -se han barajado cifras de hasta 9.000 pesetas al mes- se destinarían a la amortización de la casa. Xabier Olaberri cree que la obsesión por adquirir un piso en propiedad es en muchos casos exagerada y que la actual oferta de alquileres no se corresponde con las necesidades de muchos ciudadanos que se ven obligados a cambiar de ciudad por imperativos profesionales.

La construcción de 200 viviendas de alquiler para los estudiantes en el edificio destinado al hospital Geriátrico y otros proyectos de construcción en la zona de Ibaeta, una vez descartada la instalación de Mercaeaso, completan por el momento los proyectos de la actual corporación.

"De lo que se trata", dice Xabier Olaberri, "es de soslayar el circuito de los especuladores, de impedir que el futuro de la ciudad sea decidido por unos pocos en su propio beneficio". El responsable de Urbanismo considera que la actual ley de Suelo facilita la especulación y es obsoleta. "La izquierda española no ha abordado todavía un problema, el de la racionalización de la especulación del suelo, que ya ha sido resuelto a su manera por la derecha francesa, por ejemplo".