Los que siguen en prisión

Actualmente sólo seis de los 30 condenados por su participación en el intento golpista del 23-F continúan en prisión: el ex teniente general Jaime Milans del Bosch, el ex general de división Alfonso Armada Comyn, el ex general de división Luis Torres Rojas, el ex coronel Diego Ibáñez Inglés, el ex teniente coronel de la Guardia Civil Antonio Tejero Molina y el ex comandante Ricardo Pardo Zancada.El 22 de abril de 1983, la Sala Segunda del Tribunal Supremo dio a conocer la sentencia firme y definitiva a los recursos de casación interpuestos, tanto por la defensa como por el ministerio fiscal, contra las penas impuestas el 3 de junio de 1982 por el Consejo Supremo de Justicia Militar sobre el intento de golpe de Estado del 23 de febrero de 1981. El Tribunal Supremo confirmó las sentencias de Milans del Bosch y de Tejero y amplió las de Armada, Torres Rojas, Ibáñez Inglés y Pardo Zancada.

Milans del Bosch y Tejero fueron condenados a 30 años de reclusión como responsables, en concepto de autores, de un delito de rebelión militar, con la concurrencia de la agravante de reincidencia en el teniente coronel Tejero, con las accesorias, también a cada uno, de pérdida de empleo e inhabilitación durante el tiempo de condena. En cuanto a Armada, vio su sentencia elevarse de los seis a los 30 añospor los mismos conceptos que Milans y Tejero.

Elevadas las condenas

Las condenas de Luis Torres Rojas y Ricardo Pardo Zancada se elevaron de 6 a 12 años de prisión: Torres Rojas, como responsable, en concepto de autor, de un delito de adhesión a la rebelión, con las accesorias de separación del servicio y suspensión de todo cargo público, oficio o derecho de sufragio activo y pasivo durante el tiempo de duración de la pena privativa de libertad impuesta, y Pardo Zancada, como responsable, en concepto de autor, de un delito de rebelión militar, y a las mismas acesorias que Torres Rojas.

Diego Ibáñez Inglés fue condenado a 10 en vez de a 5 años de cárcel como responsable de un delito de rebelión militar, y a las accesorias de separación del servicio y suspensión de todo cargo público, oficio o derecho de sufragio por el mismo tiempo de duración de la pena privativa de libertad impuesta.

Relacionado con este intento golpista se encuentra en prisión provisional y pendiente de juicio por el delito de abandono de servicio y residencia tras los hechos del 23F el capitán de la Guardia Civil Gil Sánchez Valiente, a quien se le relacionó con el intento golpista al desaparecer después de su salida del Congreso de los Diputados tras la liberación de los rehenes y al atribuirle la posesión de un maletín con documentos que podrían aclarar los hechos acaecidos.