Gorbachov se 'reconcilia' con Kohl anuncia una próxima entrevista

El líder soviético, Mijail Gorbachov, transmitió "saludos cordiales" para el canciller de la República Federal Alemania (RFA), Helmut Kohl y declaró no ser "propenso a teorizar" en el tema de la "nación aleamana", durante el encuentro mantenido ayer con el presidente de la RFA, Richard von Weizsäcker, cuya visita a Moscú restablece un tono de normalidad, perdido durante el último año en las relaciones bilaterales. El canciller de la RFA, Helmut Kohl, y Gorbachov se encontrarán en un futuro y en un lugar no determinado -"de un modo o de otro-, después de una visita que el ministro de Exteriores de la URSS, Edvard Shevardnadze, debe realizar a Bonn, según anunció Von Weizsäcker.

Los saludos que el presidente dijo tener que transmitir a Kohl suponen una ruptura del hielo que provocaron las declaraciones de Kohl publicadas el pasado octubre en Newsweek, según las cuales Gorbachov era comparado al jefe de la propaganda hitleriana Joseph Goebbels.Von Weizsacker tocó el tema de la "nación alemana" en su conversación con Gorbachov, según un comunicado emitido anoche por la agencia Tass y Gorbachov respondió que "no era propenso a teorizar sobre este concepto". El dirigente afirmó que "lo importante" es el "aspecto político" y que "hay dos estados alemanes con diferentes sistemas sociopolíticos". "Lo que habrá dentro de 100 años lo decidirá la historia. Ningún otro enfoque es admisible" señaló. "Si alguien fuera por otro camino, las consecuencias serían muy serias. Debe reinar claridad absoluta sobre esto", sentenció.

Gorbachov puso en cuestión la actitud del Gobierno de la RFA ante el tratado de Moscú (1970) y dijo que "a veces surge la duda la disposición de la dirección de la RFA a atenerse consecuentemente a este tratado". El tratado de Moscú, uno de cuyos arquitectos fue el entonces ministro de Exteriores, Andrei Groiniko, puso las bases de las actuales relaciones entre la RFA y la URSS y abrió el camino de otros tratados semejantes con los países socialistas europeos. Por él, la RFA renuncia a poner en cuestión las fronteras interalemanas y a violarlas, pero mantiene abierta la llamada "cuestión alemana" y la posibilidad de reunificación en el futuro.

La situación del joven Mathias Rust, el ciudadano germano occidental encarcelado en la prisión de Lefortovo por aterrizar en la Plaza Roja a bordo de una avioneta deportiva, fue abordada también en la conversación entre Gorbachov y Von Weiszäcke que duró algo más de dos horas. El presidente se negó a dar detalles por considerar que esto no es "ni lo habitual ni lo útil" en casos semejantes. Fuentes germano occidentales se habían mostrado anteriormente optimistas sobre una eventual liberación de Rust. El portavoz del Ministerio de Exteriores de la URSS, Borispiadishev, recomendo paciencia en el caso y dijo que la investigación sigue su curso "en la forma establecida por la ley.