Síntomas somáticos y patológicos
Junto a la tristeza patológica, que es el síntoma fundamental en la depresión y otros síntomas psíquicos acompañantes (cierto grado de ansiedad y disminución de la capacidad para pensar y concentrarse), aparecen frecuentemente síntomas somáticos que a veces se enmascaran en las manifestaciones psíquicas de la enfermedad. Así, son frecuentes el cansancio, el insomnio, los dolores de cabeza, la pérdida de apetito, las alteraciones menstruales y sexuales y las alteraciones digestivas, como el estreñimiento, sequedad de boca y digestiones pesadas.Las alteraciones de los ritmos biológicos son muy frecuentes en los enfermos depresivos, ya que éstos suelen tener alteradas las rítmicas regulaciones vegetativas de su organismo; de este modo, suelen encontrarse peor en la madrugada y por la mañana, mejorando al atardecer y anochecer.
Suele aparecer también insomnio en la madrugada, empeoramiento durante la fase premenstrual del ciclo de la mujer y durante la primavera y el otoño. Además, los síntomas están sujetos en su evolución a ritmos propios en el curso del tiempo y variable de unos enfermos a otros.
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