Maurice Pialat recibió la Palma de Oro entre abucheos y silbidos
La Palma de Oro de 40º Festiva Internacional de Cine de Cannes fue entregada ayer al filme Bajo el sol de Satán, del realizador francés Maurice Pialat. La decisión del jurado fue recibida entre abucheos silbidos por el público que asistía al acto. Pialat contestó a las protestas con un gesto de desprecio. El premio especial del jurado fue para Arrepentipsiento, del soviético Tengiz Abuladze. El cineasta alemán Wim Wenders, por Las alas del deseo, recibió el galardón al mejor director. La impresión ayer, en Cannes era que el jurado de esta edición del festival había cedido a presiones que indicaban que, en este 40º aniversario, Francia no podía irse de vacío.
El actor italiano Marcello Mastroiani recibió el premio a la mejor interpretación masculina por Ojos negros. Barbara Hershey obtuvo el correspondiente a la mejor interpretación femenina por Shy people. El actor francés Yves Montand, presidente del jurado, señaló: "El jurado ha experimentado la dificultad de elegir y eso nos ha hecho incluso crueles". Pero una cosa es la crueldad y otra el pasteleo. Las grandes favoritas, La familia, de Ettore Scola, y Ojos negros, de Nikita Mikhalkov, se vieron privadas de los primeros galardones, si exceptuamos el concedido a Mastroianni. El delegado general del festival, Gilles Jacob, obtuvo también un reconocimiento, por parte de la Comisión Superior Técnica del Cine, a su filme recordatorio El cine en los ojos. La película Entrevista, del italiano Federico Fellini, que se presentaba fuera de concurso, recibió un premio especial con, motivo del cuarenta aniversario del festival.El premio a la mejor contribución artística fue para Prick up your ears del británico Stephen Frears. Los filmes Yeelen, de Souleymane Cisse, de Malí, y Shinran: shiroi michi, del japonés Rantano Mikun, obtuvieron premios especiales del jurado. Las actrices norteamericanas Jean Simmons y Jane Russell recibieron sendos homenajes.
Premios no oficiales
El jurado internacional que concedió el palmarés de Cannes 87, presidido por Montand, estaba formado además por el escritor norteamericano Norman Mailer, el productor francés Gérald Caldepón, el músico italiano Nicola Piovani, el director polaco Jerzy Skolimovski, el cineastaco Elem Klimov, el cineasta griego Theo Angelopoulos y la periodista francesa la Daniele Heyman.
Los premios no oficiales más importantes, el de la Crítica. Internacional y el del Jurado Ecuménico, fueron concedidos unánimemente a Arrepentimiento de Abuladze. El premio Juventud fue otorgado a El canto de la sirena, de la canadiense Patricia Rozenta y La Cámara de Oro, que premia a la mejor "ópera prima" de las exhibidas en todas las secciones del festival, fue a manos de la joven cineasta soviética Nana Djorzhadje, por su película Robinsonada de mi abuelo inglés.
La enorme capacidad de convocatoria de este festival hizo que anoche el Gran Auditorio Lumiere del palacio de La Croisette estuviera abarrotado de notorias personalidades del cine procedentes de todo el mundo. Entre ellas se encontraban Federico Fellini, Paul Newnian, Mickey Rourke, Richard Gere y Faye Dunaway.
El número total de personas acreditadas como invitados, participantes e informadores en Canues alcanzó este año la cifra record de 22.000 personas, que han dejado a la capital de la Costa Azul en sólo 12 días un reguero de divisas que supera los 6.000 millones de pesetas, cifra alrededor de la que es posible ver el colosal esfuerzo que supone la delebración anual de esta gran feria del cine mundial.
Esta gran feria terminó con una espantosa película titulada Aria, cuya proyección empañó la clausura del festival. No es fácil encontrar un conjunto de mediocridades tan completas como las ofrecidas en esta película, que quiere inútilmente representar una detrás de otra una serie de arias famosas de la historia de la ópera. En la sesión celebrada para la prensa la película discurrió entre la rechifla de los asistentes, siendo la única obra del concurso que fue unánimemente rechazada.
