Libia y Mauritania fueron previamente informadas por Argel de la cita

El presidente argelino, Chadli Benyedid, informó el domingo por la noche, mediante una conversación telefónica, al líder libio, uammar el Gaddafi, de sus intenciones de entrevistarse con el rey Hassan II de Marruecos. Argel anunció ayer, a través del periódico oficial El Mudjahid, de la existencia de esa conversación telefónica, sin dar más detalles, pero lo observadores de la zona no dudan en que estuvo centrada en torno al acontecimiento. El ministro de Asuntos Exteriores mauritano, Mohamed Uld Lamm, recibió, por su parte, el domingo en Nuakchot al embajador argelino en su país, también con las mismas intenciones.La entrevista de Akid Lutfi ha creado "una expectación total" en el Magreb, según fuentes diplomáticas. La agencia argelina APS se limitó a informar del comienzo de la cumbre, sin aportar valoración alguna. Dicha agencia calificó también la presencia del rey Falid de Arabia Saudí en Orán de "visita de amistad" eludiendo cualquier otro comentario.

El Frente Polisario comisionó a su embajador en París, Mohamed Sidati, para que ofreciera su propia impresión sobre la cumbre tripartita. Sidati aclaró que "el pueblo saharaui reclama el derecho a la autodeterminación"; explicó que Marruecos y Argelia son dos países que no están en guerra y que tienen todo el derecho, por ser soberanos, a encontrarse, y acusa tímidamente a Arabia Saudí de ser "el principal valedor y proveedor de armamento de Marruecos", lo que se interpretaba en Rabat como un "aviso de desconfianza" ante la mediación del rey Fahd.

Arabia Saudí, por su parte, informó a través de la agencia oficial SPA que la presencia de Fahd en Akid, Lutfi junto a Hassan II y Benyedid tiene como fin unir a los países hermanos y buscar la aproximación de puntos de vista divergentes, en interés de la nación árabe".