Encierros de funcionarios

Los funcionarios del hospital Penitenciario de Carabanchel y de otras cárceles de Sevilla, Almería y Badajoz protagonizaron ayer encierros en sus respectivos centros como protesta por las deficientes condiciones sanitarias en las que realizan su traba o. Este conflicto, que hoy y mañana se mostrará también con una huelga de celo de funcionarios, se une a las críticas que ha hecho la Unión de Funcionarios de Instituciones Penitenciarias (UFIP) al Ministerio de Justicia en relación con la propagación del virus del SIDA en los establecimientos penitenciarios.Funcionarios de la prisión de Almería denunciaron ayer la existencia de enfermos de SIDA, hepatitis y tuberculosis en un número considerable, que provocó que el Sindicato Profesional de Instituciones Penitenciarias (SPIP) llevaran a cabo huelga de celo en solidaridad con los compañeros de otras prisiones españolas, informa Antonio Torres.

Los funcionarios de hospitales en general y la plantilla del hospital Penitenciario de Carabanchel, en particular, piden una mayor dotación de medios materiales y humanos para atender a los reclusos enfermos y una política sanitaria que evite enfermedades infecciosas. Por este motivo realizan también hoy y mañana una huelga de celo.

Andrés Márquez Aranda, director general de Instituciones Penitenciarias, ha mostrado "extrañeza" ante las reivindicaciones de los funcionarios de prisiones sobre el problema del SIDA, "puesto que la Administración ha explicado suficientemente en el Parlamento las medidas que se aplican conjuntamente con el Ministerio de Sanidad".

Entre estas medidas figuran los cursos de preparación de personal sanitario que comenzarán mañana; los folletos de información que se impartirán en las cárceles; el reparto gratuito de preservativos en las cárceles y el reparto de guantes a los funcionarios, que ya se está haciendo. "El problema sanitario existe pero no vamos a recluir en guetos a las personas que no están enfermas del SIDA", añade Andrés Márquez.