España se librará de los costes del acuerdo con Marruecos y no pagará los excedentes de la CE, según Pedro Solbes
Los costes del acuerdo pesquero hispano-marroquí serán absorbidos por la Comunidad Europea (CE). España tampoco pagará los excedentes comunitarios de mantequilla, según afirmó ayer ante la comisión mixta Congreso-Senado el secretario de Estado para las Relaciones con la CE, Pedro Solbes, quien aseguró que la reforma presupuestarla de la CE será todavía más beneficioso para España que la situación actual.
El secretario de Estado expresó confianza en alcanzar un entendimiento sobre el acuerdo pesquero con Marruecos antes de que venza, en agosto próximo, "aunque por razones de todo tipo se retrasa la negociación". Dijo que el acuerdo "ha funcionado bien, porque se ha pescado y se han obtenido beneficios". Pero ahora la CE "debe absorberlo, pues el acervo comunitario juega de ida y vuelta. Si no encuentra una solución bilateral, tendrá que adoptar medidas indemnizatorias".Solbes explicó luego a los periodistas que, si bien el sumario de las conversaciones es "semisecreto", uno de los problemas económicos se centra en cómo valorar y transformar en dinero las ayudas (más de 150 millones de dólares al año) proporcionadas por España a Marruecos a través del canon de pesca, los créditos del Fondo de Ayuda al Desarrollo (FAD) y los créditos a los bajos tipos de interés.
Igualmente, el secretario de Estado se mostró esperanzado sobre el éxito de la negativa española a pagar los stocks de mantequilla, unos 400 millones de ECU. El portavoz del Grupo Socialista se ofreció a promover una resolución parlamentaria en contra de la decisión del Consejo de Ministros de la CE. Pero Solbes apuntó que la exigencia española de unanimidad para este asunto y los propios fundamentos de su posición (el acta de adhesión dice que España pagará sólo sus stocks, y existente en compromisos políticos para no resultar contribuyente neto) aconsejan esperar antes de agotar todas las posibilidades.
El optimismo de Solbes, quien rechazó las críticas del CDS, PDP y AP sobre el balance de la adhesión, se extendió a las repercusiones del proyecto de reforma financiera de la CE. "Todos los miembros van a pagar más", dijo, "pero tras esta operación aumentarán las posibilidades de que España reciba mayores recursos de los que aporta". Ello obedece, por un lado, a que no pagará el cheque inglés (las devoluciones al Reino Unido por haber soportado en los últimos años mucho más de lo recibido por su escasa actividad agrícola). Además, la CE tiene intención de aumentar los gastos para compensar los desequilibrios estructurales.
El proyecto consiste en pasar antes de 1992 desde el 1,4% del IVA al 1,4% del PIB, que representa cerca del 2% del IVA. Como ello entraña una mayor aportación de todos los países, pocos esperan acuerdo, ni del Consejo de Ministros previsto para los próximos días 26 y 27, ni de la reunión de jefes de Estado de junio. Para impedir el vacío en 1988, unos países proponen pasar el próximo año desde el 1,4% al 1,6% del IVA y otros, caso de España, prorrogar los presupuestos por doceavas partes hasta alcanzar la reforma global.
