Un jesuita aconsejó al Papa no pagar la deuda del IOR, según 'Panorama'
El papa Juan Pablo II pidió personalmente a Virginio Rotondi, un jesuita de 75 años, que le diera una opinión sobre el complejo problema del Instituto de Obras para la Religión (IOR) y de su presidente, el arzobispo Paul Marcinkus, y le autorizó a husmear en los archivos del banco Vaticano, según ha declarado ese sacerdote al semanario Panorama. Rotondi aconsejó al Papa no pagar ni un céntimo de la deuda del Banco Ambrosiano.Rotondi, una figura muy popular en los años del anticomunismo visceral, que junto al padre Riccardo Lombardi era conocido como el micrófono de Dios, llegó a esa conclusión categórica ya que, según declaró, Marcinkus fue engañado por el presidente de esa entidad, Roberto Calvi.
Decisión personal
Preguntado por qué la Santa Sede pagó 240 millones de dólares (unos 31.200 millones de pesetas), el jesuita declaró a la revista: "Fue una decisión personal del Papa. Cuando yo mismo le llevé al cardenal Agostino Cassaroli mi informe, éste, después de leerlo, exclamó, levantando los brazos: 'Dios mío, ¿qué puedo hacer si el Papa insiste?'".Juan Pablo II, cuenta Rotondi, quiso pagar el dinero "convencido de que de este modo se cerraría para siempre el asunto" ' pero no ocurrió así. "La lógica de los papas no suele seguir la del mundo", afirma el sacerdote, quien añade que el papa Wojtyla quiso pagar aún sabiendo que Marcinkus era inocente.
Rotondi comentó sobre la actitud de Marcinkus de firmar unas cartas de garantía en favor de Calvi: "Fue una idiotez del tonto de Marcinkus, y basta. Calvi se las pidió para acallar a los hombres de su banco, que lo criticaban por ciertas operaciones. Fue un favor que se ha vuelto como un bumerán contra quien lo hizo de buena fe".
De Marcinkus, el padre Rotondi dice que es inocente, "pero tacaño y un poco charlatán. Habla, promete y no hace nada. Cuando he estado con él y se me han acabado los cigarrillos, ni siquiera me ha dado un paquete". A la pregunta de si es cierto que Marcinkus no le es demasiado simpático, el jesuita responde: "¿Quiere que le diga lo que yo pienso de verdad acerca del IOR, y así acabamos de una vez? Enviaría un carro de combate contra el IOR. Al único que salvaría es al secretario general, Donato de Bonis, un puro, pero ingenuo, a quien el Papa ama en su corazón".
Rotondi manifestó ayer que la entrevista a Panorama es inexacta. El autor de la misma, el periodista Romano Cantore, dijo a EL PAÍS que la entrevista se realizó a petición del propio jesuita y que las manifestaciones más duras no fueron publicadas. Por ejemplo, Rotondi contó al entrevistador que el cardenal Pietro Palazzini, prefecto de la Congregación para la Causa de los Santos, mecenas del Opus Dei, se reunió 15 veces con el banquero Calvi en su despacho vaticano.
