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Las cuotas empresariales a la Seguridad Social se reducirán en cuatro años

A pesar de que este año no habrá concertación social, los servicios técnicos de los ministerios de Economía y Hacienda y Trabajo y Seguridad Social no han recibido orden de parar la elaboración de sus propuestas con vistas a una reducción de las cotizaciones empresariales a la Seguridad Social para los próximos cuatro años, a partir de 1988. Estos trabajos responden al acuerdo no hecho público entre el ministro de Economía, Carlos Solchaga; el de Trabajo, Manuel Chaves, y la CEOE, adoptado durante la negociación de los Presupuestos Generales del Estado para 1987.

Los sindicatos no estarán presentes en esta mesa negociadora, según dijo públicamente el ministro de Trabajo, Manuel Chaves, a pesar de que tanto UGT como CC OO lo han puesto como condición para aceptar la reducción de las cotizaciones empresariales a la Seguridad Social. La mesa negociadora que se constituirá a finales del mes próximo o principios de abril hará públicos sus acuerdos, una vez que pase la marca de la negociación de los convenios colectivos, para evitar que el posible anuncio de una deducción en las cotizaciones se traduzca en mayores incrementos salariales, afirman fuentes de Economía.Durante el período de consulta abierto a finales del año pasado sobre los Presupuestos del Estado para 1987, el Gobierno, a través de los ministros de Economía y Trabajo, propuso a los empresarios una reducción de una décima -unos 8.000 millones de pesetas- en sus cotizaciones sociales, propuesta que fue rechazada por CEOE por "insignificante". A partir de ese momento, se decidió la constitución de comisiones de trabajo en los ministerios de Economía y Hacienda y de Trabajo y Seguridad Social que en estos días ultiman sus propuestas, para, en el plazo de quince días, elevarlas a los respectivos ministros, de cara a presentar una postura homogénea ante la CEOE. El paso siguiente es la constitución de la mesa negociadora con la patronal.

El objetivo, al que no ha renunciado el Gobierno a pesar de que no hay concertación, es conseguir que en los próximos cuatro años, es decir, a las puertas de que finalice el período transitorio de integración en las Comunidades Europeas (CE), los costes sociales que soportan los empresarios estén en línea con los restantes países europeos. Aunque este objetivo es compartido por la patronal, existe una diferencia en cuanto al trecho que hay que recorrer. Según la CEOE, lo que nos separa de Europa son 20 puntos porcentuales, es decir, que la participación de las cotizaciones empresariales en la financiación de la Seguridad Social es 20 puntos mayor en España que en Europa.

Según los primeros estudios técnicos realizados por Economía y Trabajo, esta diferencia no hay que medirla en términos porcentuales sino en tipos de cotización, y la distancia se acorta considerablemente. Es decir, en España, al haber un mayor porcentaje de economía sumergida y de bases no declaradas, el peso de cotizaciones sociales que se soporta por cabeza es mayor que en Europa, por lo que seguir este criterio lleva a inflar considerablemente las diferencias.

Tipos de cotización

Para Economía y Trabajo, sin embargo, el criterio que hay que utilizar es el de los tipos de cotización, en la actualidad, el 28,8 para los empresarios españoles, calculado sobre el tanto por ciento de la remuneración salarial bruta. De esta forma, Francia es el país que lo tiene más alto (46,4%), seguido de Italia (45,6%) y Bélgica (38,8%). Por detrás de España están Reino Unido (10,4%), Irlanda (11,6%) y Portugal (21,5%). La media de diferencia está entre 4 y 6 puntos, por lo que la reducción podría producirse al ritmo de un punto por año, a partir de 1988.El aumento del tipo medio del IVA como forma de compensar esta reducción está prácticamente descartado y sólo se utilizará en último extremo, según fuentes de la Administración. El razonamiento, para las mismas fuentes, es que incrementar el IVA, medida que no se tomará durante este ejercicio, supondrá un efecto positivo sobre la inflación, y esto se considera especialmente peligroso en un año en que no hay pacto social.

En cualquier caso, la armonización fiscal con la CE es algo a lo que España, junto con los demás países comunitarios, está abocada y supondrá un incremento de los tipos con un calendario que va hasta 1992.

El criterio es retrasar hasta los últimos años un incremento del IVA ya que, además de generar inflación, supondría un aliciente menos para la inversión extranjera, lujo que no se está dispuesto a permitir ya que se espera de ella que continúe el tirón de los últimos años.

Según datos de Hacienda, en la actualidad existen seis puntos de diferencia entre el tipo medio español y el de la CE, distancia que habrá que acortar hasta 1992. España es, junto con Luxemburgo, el país que tiene el tipo medio más bajo (12%), y los más altos son los de Irlanda (25%), Dinamarca (22%) y Países Bajos y Bélgica (19%). Los demás países se mueven entre el 18% (Francia, Italia y Grecia), 16% (Portugal), 15% (Reino Unido) y 14% (Alemania).

Como alternativa al incremento del IVA se está estudiando un recorte del gasto fiscal en el impuesto de sociedades, es decir, del conjunto de deducciones y desgravaciones que hacen que Hacienda ingrese menos para favorecer determinadas actividades, como la inversión y la creación de empleo. Los gastos fiscales se consideran excesivos, ya que suponen, en 1987, un 34% sobre la recaudación esperada, en total, 185.400 millones de pesetas. El otro mecanismo es redoblar la lucha contra el fraude tanto fiscal como de la Seguridad Social.

Mantener el gasto

Según las directrices dadas por los ministros a los servicios técnicos de Economía y de Trabajo, "las premisas" son que el gasto social de la Seguridad Social se mantenga, es decir, que no haya un nuevo recorte de pensiones y procurar que él impacto de las medidas sea mayor sobre el empleo y menor sobre la inflación, de forma que no se incremente la presión fiscal.Para lograr todo esto, ello se están estudiando diferentes escenarios con las variables de empleo, inflación, IVA y Seguridad Social.

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