El Gobierno pedirá a la OTAN que en las zonas estratégicas defendidas por el Ejército español no haya fuerzas aliadas

El próximo día 30, fecha en que se iniciarán las negociaciones para fijar los programas militares de coordinación entre las Fuerzas Armadas españolas y el potencial de la OTAN, España planteará, como principio global básico, que no haya fuerzas aliadas en las zonas estratégicas cuya defensa pueda ser cubierta por los propios ejércitos españoles. Según han asegurado diversas fuentes gubernamentales, España y la Alianza Atlántica ya han intercambiado informaciones confidenciales y secretas sobre sus respectivos planes estratégicos en el área de interés defensivo para España. El Gobierno español, según estas fuentes, ha facilitado ya importantes datos sobre el Plan Estratégico Conjunto (PEC).

La pasada semana, y en la sede del Ministerio español de Defensa, se reunieron para preparar dichas negociaciones el embajador de España en la OTAN, Jaime Ojeda; el jefe del Estado Mayor de la Defensa, Ángel Liberal; el secretario general de Política Exterior, Máximo Cajal, y el director general de Política de Defensa, almirante Fernando Nárdiz. Ojeda será quien presida la delegación española en las reuniones, estará asistido por técnicos de los ministerios de Defensa, Asuntos Exteriores y Presidencia.El Gobierno español, según las fuentes informantes, pretende que la aportación militar española a la Alianza Atlántica esté basada en la capacidad de defender autónomamente el territorio nacional y su espacio estratégico de interés y de proteger las comunicaciones conectadas o utilizadas en beneficio de sistemas empleados por los aliados. No obstante, hay puntos de muy alto valor estratégico que, como coinciden expertos militares nacionales y extranjeros, sólo pueden ser controlados por una de las dos grandes potencias. Es el caso, por ejemplo, del Estrecho de Gibraltar, cuyo control real no puede ser hoy asumido por las Fuerzas Armadas españolas.

Para enlazar las acciones y misiones de las Fuerzas Armadas españolas y de las de la Alianza Atlántica en esas zonas de alto valor estratégico y en otras de interés mutuo o limítrofes, los negociadores que se reunirán por primera vez el próximo día 30 tratarán de alcanzar a lo largo de varios meses distintos acuerdos de coordinación militar.

Misiones estratégicas

La Alianza Atlántica ya ha comunicado "con bastante detalle" las misiones estratégicas que tienen sus fuerzas en las zonas de interés para España, mientras España, "aunque no muy minuciosamente", también ha facilitado datos sobre el Plan Estratégico Conjunto (PEC).Como ejemplo de coordinación entre fuerzas españolas y de la OTAN, unidades navales y áreas conjuntas han realizado en los últimos meses diversos ejercicios militares en los que se han dividido las misiones y acciones de acuerdo con el principio español. Así, entre los pasados, 4 y 11 de abril, unidades navales y aéreas de España y de la OTAN (procedentes de la República Federal de Alemania, Francia, Estados Unidos, Reino Unido, Holanda, Italia y Portugal) participaron en el ejercicio Tapón 86, consistente en el cierre y control total del Estrecho de Gibraltar y de sus inmediaciones.

Para enlazar los programas de coordinación e intercambiar información constante, España, que mantendrá su postura de no participar en la estructura militar integrada de la Alianza Atlántica -es decir, que no tendrá fuerzas asignadas para intervenir fuera del territorio ni los mandos militares aliados tendrán jurisdicción sobre las fuerzas y el territorio españoles-, nombrará en breve al menos cinco enlaces militares ante dichos mandos aliados.

Dos o tres serán nombrados, enlaces ante ACE (Mando Aliadio de la OTAN en Europa) -y concretamente en SHAPE (Cuartel General de las Potencias Aliadas en Europa) y en el inriando principal de Nápoles (AFSOUTH) y en el cuartel de defensa aérea-; otro ante ACLANT (Mando Aliado en el Atlántico), en Norfolk (EE UU), y, otro ante IBERLANT (mando con sede en Lisboa dependiente de ACLANT).