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La CE y EE UU alcanzan un acuerdo provisional sobre las ventas agricolas norteamericanas que en la 'guerra comercial'

La Comunidad Europea (CE) y el Gobierno de EE UU alcanzaron ayer un acuerdo provisional que evita el desencadlenamiento de una guerra comercial entre ambas áreas como consecuencia del ingreso de España en la Europa comunitaria, según anunció ayer en conferencia de prensa el comisario europeo Willy de Clercq.El comisario belga y Clayton Yeutter, representante especial del presidente Ronald Reagan para el comercio, negociaron el fin de semana en Annapolis (Maryland, EE UU) y en el avión en el que vlajaron después a París las medidas exigidas por Washington como compensación por la disminución de las exportaciones norteamericanas de maíz y sorgo a España, evaluadas en 87.000 millones de peseta.s anuales, que: conlleva la incorporación española a la CE.

El compromiso logrado prevé que dilarante el próximo semestre las ventas estadounidenses de estos dos cereales en el mercado español, así como de gluten de maíz, desechos de cerveza y cortezas de limón -tres productos que hasta ahora España no compraba a EE UU-, serán vigiladas.

Si el mercado español absorbe mensualmente menos de 234.000 toneladas, la CE tomará las medidas adecuadas para que las importaciones de los doce aumenten hasta alcanzar la cantidad estipulada. Este mecanismo entrará en vigor en octubre.

Francia se reserva

De aquí a finales de año continuarán las conversaciones entre la Comunidad Europea y EE UU, cuyo objetivo es lograr un acuerdo definitivo que ponga fin al litigio provocado por la ampliación de la CE. El actual compromiso temporal "no prejuzga ni constituye un precedente del resultado final de la negociación", manifestó De Clercq. El resultado alcanzado fue aprobado ayer por los representantes de los doce -con excepción de Francia, que emitió una reserva- y deberá ser confirmado por los ministros de Asuntos Exteriores dentro de tres semanas. Los productores galos de maíz eran los pripcipales beneficiarios del bajón registrado en las ventas norteamericanas de este producto a España.

El comisario europeo se mostró confiado en obtener el visto bueno de los titulares de Exteriores porque, recalcó, "no hemos excedido el mandato del Consejo, y el compromio respeta el tratado de adhesión de España a la CE".

El texto realizado por De Clercq y Yeutter tiene el mérito de evitar, o por lo menos posponer, la aplicación de las sanciones comerciales con las que EE UU había amenazado a la CE a partir del 1 de julio. Estas sanciones consistían en aumentar los derechos de aduana de una serie de producte,s europeos. Los doce tenían previsto responder con medidas similares.

El acuerdo supone también, señalan algunos observadores, una victoria relativa de las tesis noileamericanas. Aunque de forma fimitada, deroga el principio de: la preferencia comunitaria para algiinas exportaciones de cereales a España y sobre todo implica. el abandono del argumento europeo. Los doce insistían en que los aspectos negativos de la inclusión, de la península Ibérica en la CE pasa la agricultura de EE UU eran ainripliamente compensados por las ventajas que obtenía su industria.

Antes de que la Casa Blanca comunicara sus represalias, el órgano ejecutivo de la CE era incluso reacio a negociar compensaciones, por considerar que a partir del 1 de enero las ventas de productos industriales norteamericanos en España iban a ser cinco veces superiores a sus pérdidas agrícolas.

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