Los edificios rehabilitados y las plazas reformadas acaparan los Premios de Urbanismo y Arquitectura

La reforma de la plaza de los Carros, la recuperación de las bocas de metro y la rehabilitación de la Casa de Vacas del Retiro y del palacio Anglona para viviendas han obtenido algunos de los 12 Premios de Urbanismo y Arquitectura del Ayuntamiento de Madrid, que no se daban desde antes de la guerra civil. Con la recuperación de estos galardones se han incorporado novedades como la de premiar lo que, a juicio de los responsables del urbanismo, "también es ciudad" por lo que se ha dado un premio al bibliobús del Ministerio de Cultura o a la campaña publicitaria de Arco 85.

Un jurado compuesto por el escritor e ingeniero Juan Benet; los arquitectos Alejandro de la Sota, Francisco Cabrera y Julio Cano Lasso, y los ingenieros de caminos Enrique Balaguer y José Antonio Fernández Ordóñez, ha sido el en cargado de seleccionar los ganadores de entre los trabajos presentados. Estos proyectos, más de un centenar, fueron presentados por los propios autores o elegidos por el Ayuntamiento.La gran cantidad de proyectos presentados impidió que los miembros del jurado se personaran en el lugar de las obras realizadas, por lo que en buena parte de ellos los juzgaron a base de fotos y planos. En el capítulo correspondiente a proyectos que resuelven espacios urbanos, tratamiento de muros y cerramiento de parques, diseño de elementos urbanos y obras; de ingeniería, fueron premiados la plaza de los Carros, realizada por los arquitectos municipales Emilio Esteras y Ricardo Mínguez, que fue objeto de críticas y de una cierta contestación a causa de lo que se consideró un tratamiento duro; el bibliobús de la Dirección General del Libro y Bibliotecas, del Ministerio de Cultura, diseñado por Blanca Lleo, Jesús San Vicente y Pedro Urzáiz, y la remodelación de 150 bocas de acceso al metro, obra de Pedro Lucero, de la Compañía Metropolitano de Madrid.

El premio a los edificios construidos en un barrio aún no consolidado se dio al centro de formación profesional de Orcasitas, proyectado por Francisco Rodríguez de Partearroyo; al edificio de la empresa óptica Essilor, en Fuencarral, con planos de Juan José Sanz y Juan López Rioboo, y al centro parroquial Santa Irene, en Palomeras, de Manuel e Ignacio de las Casas. Asimismo se galardonó al colegio público República de Brasil, en la colonia de San Fermín, con planos de Alberto Campo, como mejor edificio construido en una zona ya consolidada.

Los tres edificios premiados dentro del capítulo de rehabilitación han sido la Casa de Vacas, en el parque del Retiro, obra de Guillermo Costa y promovida también por el Ayuntamiento; el palacio de Anglona, en la calle de Segovia, recuperado para viviendas de acuerdo con el proyecto de Ignacio Blanco, y la residencia de señoritas de la calle de Martínez Campos, realizada por Jerónimo Junquera y Estanislao Pérez Pita, cuyo destino futuro no está aún fijado. Por último se premió el diseño de la tienda IBM de la calle de Velázquez, obra de Mario Fernández Barberá y Juan Oliva, y la campaña publicitaria para Arco 85, hecha por Diego Lara y Juan Aviño.

El premio para estos 12 proyectos consistió en la entrega a los autores de una gran medalla diseñada por Iñaki Ábalos y en la devolución a los promotores de lo pagado en concepto de licencia de obras hasta un total de tres millones de pesetas a cada uno. Con estos premios se retoma una tradición instaurada a raíz de que Alberto Aguilera, siendo alcalde, creara unos premios municipales que se dieron a lo largo del primer tercio de siglo.

Crear marcos idóneos

Las medallas conmemorativas fueron entregadas por el alcaldde, Juan Barranco, quien calificó la convocatoria de estos primeros premios como "un primer paso para que Madrid recupere su historia y para que, paralelamente, vayamos haciendo esa ciudad del futuro".El alcalde comentó también el hecho de que el jurado se constituyera con personas no ligadas a la Administración local, "lo que ha permitido al Ayuntamiento de Madrid recibir también una mención".